donostia - Imanol Alguacil se mostró anoche muy autocrítico después del partido disputado frente al Huesca en Anoeta. “El rival ha hecho su trabajo y nosotros no hemos estado bien, ni el equipo ni yo. Cuando se te encierran así, no es fácil hacer daño al adversario. En la primera parte nos ha faltado pausa y nos ha sobrado precipitación. Además, no hemos sabido interpretar los movimientos que habíamos trabajado. Pienso que hemos mejorado en la segunda parte. Pero no ha sido suficiente para ganar”.

El técnico fue comprensivo con los silbidos que recibió el equipo a la conclusión del encuentro. “La gente está viviendo una temporada difícil en Anoeta, donde no se han dado muchas alegrías”. Eso sí, Imanol destacó la dificultad que entrañaba ayer el duelo ante un Huesca “que venía compitiendo bien en casi todos sus encuentros”. “Cuesta ganar a cualquier rival. Ha sido una pena. Queríamos dar otra imagen ante nuestra afición y sumar los tres puntos. Hay que analizar cómo se ha dado todo y mirar ya al siguiente partido”, indicó el oriotarra, quien se declaró “responsable” de la actuación protagonizada ayer por los suyos.

Lo cierto es que el viernes había hablado de un Huesca “valiente y atrevido”, características opuestas a las mostradas ayer por los aragoneses. “Llevaban tiempo sin jugar con defensa de cinco y nos han sorprendido. Señal también del respeto que nos tenían. Habíamos preparado el encuentro pensando en que alinearían una zaga de cuatro. Al final se han defendido bien y hay que darles el mérito que tienen. Nosotros, mientras, no hemos estado bien. Y yo mismo no he estado afortunado a la hora de guiar al equipo en la búsqueda de la victoria”.

Preguntado para terminar por el mercado invernal de fichajes que se cierra esta semana, Imanol redundó su confianza en la plantilla. Respecto a posibles salidas, y cuestionado de forma concreta por Rubén Pardo, excluido de la convocatoria, Imanol explicó que el centrocampista riojano dispone del alta médica pero “no está apto” para competir. Arrastra molestias en el hombro desde el golpe que sufrió el 6 de enero en el Bernabéu.

francisco Por su parte, el entrenador del Huesca, Francisco, dijo sentirse satisfecho con el partido de los suyos, aunque subrayó que él quería “ganar el encuentro”. “Estoy contento con el espíritu luchador y la mentalidad que hemos tenido. Hemos hecho un trabajo fantástico, hemos dejado la portería a cero y, analizando las ocasiones de uno y otro, hemos estado más cerca de ganar que la Real. Hemos obtenido un buen resultado, pero el modo en que el equipo ha competido no es novedad. Ya había actuado así en campos como Mestalla o el Sánchez Pizjuán”.