donostia - Cuando el Barcelona funciona en lo colectivo, sus partidos entran en territorio Messi. Pasan los años y el menudo atacante continúa poniendo su clase al servicio del cuadro culé, firmando actuaciones como la que supusieron sus estratosféricos 60 minutos del jueves en el encuentro copero frente al Celta. En cualquier caso, conviene subrayar también que el rendimiento del argentino sube enteros cuando carbura el engranaje grupal tejido a su alrededor. Y esto sucede en el actual equipo de Ernesto Valverde. Messi y las sociedades que establece sobre el césped marcan la diferencia en lo individual. En lo táctico, mientras, las sobresalientes cifras de la escuadra blaugrana responden principalmente, y entre otros muchos factores, a una presión adelantada tan eficaz como asfixiante.

Solo 72 horas después de aniquilar al Celta en el Camp Nou, el Barça se encontrará mañana en Anoeta (20.45 horas) con un rival de características parecidas a las de los gallegos. Y es que la Real de Eusebio, como el equipo de Unzúe, intenta cuidar la salida de balón buscando con combinaciones en corto al hombre libre. Se trata de una de las máximas del actualmente discutido estilo txuri-urdin, una propuesta que entraña muchos riesgos en escenarios como el que se avecina mañana pero a la que el técnico blanquiazul no está ni mucho menos dispuesto a renunciar. “Nuestra idea nos hace más fuertes. Tengo futbolistas con talento, que forman un grupo solidario y comprometido. Si mis jugadores han manifestado esta semana que confían en esta idea de juego, es porque están convencidos. Yo les veo capaces de mostrarse fuertes haciendo lo que intentamos siempre. Solo tenemos que insistir y trabajar para conseguir ejecutarlo a buen nivel de forma más regular”, dijo ayer el técnico.

los posibles retoques En su comparecencia en las instalaciones de Zubieta, Eusebio fue preguntado acerca de si se plantea apostar por variantes tácticas en el corto plazo, ante los irregulares resultados cosechados recientemente. “Debemos mejorar los automatismos que llevamos tiempo utilizando, e incorporar también otros nuevos para superar las dificultades que nos plantean los adversarios. Pero nuestra evolución siempre se va a producir sobre una base futbolística que trabajamos desde meses atrás”, dijo el de La Seca, reiteradamente “convencido” de que el camino elegido es el correcto. “Estoy convencido de mis ideas, convencido de mi propuesta y convencido de que este es el estilo de juego ideal para este tipo de futbolistas”.

La ejecución de esta propuesta puede verse dificultada mañana ante el Barcelona, dadas las mencionadas características del cuadro catalán en su vertiente defensiva. “Se trata de un rival muy equilibrado, es cierto. Defienden muy bien. Están mostrando un funcionamiento colectivo que les permite ser consistentes, y mantienen además sus grandes virtudes en la faceta ofensiva. Pero, ante todo ello, nosotros intentaremos sacar lo mejor de nosotros mismos, y hacer bien todo aquello que somos capaces de hacer bien. Si ofrecemos nuestra mejor versión, tendremos muchas posibilidades de obtener un buen resultado”, repitió una semana más el técnico txuri-urdin, que se mantendrá mañana en Anoeta fiel a su ideario futbolístico, a la hora de plantear el partido contra los culés.

la posición de xabi prieto Quizás parte de los matices en los planteamientos a los que se refirió ayer Eusebio consistan, por ejemplo, en el intercambio de posiciones que han protagonizado en los dos últimos partidos Xabi Prieto y Zurutuza. “Trasladando a Xabi a la izquierda buscamos llenar el centro del campo, tanto con su posición como con la del propio David, quien deja espacio libre en la derecha para las subidas de Odriozola. Se trata de un recurso más, de una variante que utilizaremos o no en función de las circunstancias y de los rivales, buscando siempre tener el control de los partidos”, zanjó el técnico, para quien la visita del Barcelona supone “una motivación y una oportunidad”. “Podemos ganar. El rival está ofreciendo buenísimas sensaciones. Pero si damos nuestro mejor nivel...”.

Aprietan Messi y Luis Suárez. Jonny, lateral zurdo del Celta, tiene el balón, presionado por André Gomes. Luis Suárez tapona el pase atrás al portero. Y Messi salta a por Fontás. Busquets aprieta en zonas muy adelantadas a Lobotka, el pivote de los gallegos. Y Rakitic e Iniesta acompañan para dificultar la salida del esférico del cuadro vigués. El Barcelona robó el jueves, gracias a todo este trabajo colectivo, un sinfín de balones en situaciones comprometidas, y sometió a su rival en una gran primera parte.

Un bloque muy alto. La imagen, de la segunda mitad ante el Celta el jueves, ilustra cómo eleva todo su bloque el Barcelona para dificultar el inicio de las jugadas del rival. Rakitic y Busquets, los dos pivotes, saltan a posiciones muy adelantadas para presionar a Lobotka y Jozabed, pero el resto del equipo les acompaña en este trabajo.

Gran presión tras pérdida y 4-0. Un ataque del Barcelona murió en las inmediaciones del área visitante, y el balón cayó a los pies de Pione Sisto. El extremo del Celta se vio rodeado en cuestión de centésimas de segundo por Rakitic, Semedo y André Gomes, cuya inmediata presión tras pérdida provocó su error. Agobiado por tres rivales, el danés cedió muy forzado a su portero, en un pase que interceptó dentro del área Luis Suárez para marcar el momentáneo 4-0.