Donostia - Tras anunciarse la semana pasada su renovación como director deportivo de la Real hasta 2019, Lorenzo Juarros completará diez temporadas en el cargo. Una eternidad si tenemos en cuenta la situación del fútbol actual, en el que las destituciones, los recambios y las innovaciones están a la orden del día. En la Liga, Monchi y Loren eran los que más perduraban en su puesto de máximo responsable deportivo hasta que, al término de la recién finalizada temporada, el gaditano dejó el Sevilla para tomar rumbo a Roma. Loren queda ahora como el más longevo de Primera División.

Diferentes motivos que han ido sucediéndose a lo largo de su dilatada trayectoria en el club txuri-urdin han convertido a Loren en un auténtico superviviente.

Tras colgar las botas en 2002 -debutó con el primer equipo blanquiazul en 1984 para jugar después también en el Athletic y el Burgos y finalizar en la Real como capitán-, Loren ingresó el mismo verano en la estructura técnica de Zubieta: bajo el mandato en el área deportiva de Roberto Olabe, primero como técnico del equipo infantil; después como ayudante de Gonzalo Arconada en el Sanse; y, más tarde, como segundo de Jose Mari Amorrortu en la primera plantilla. Ya con Jose Mari Bakero como director deportivo y tras el cese del técnico vizcaino -enero de 2006-, Loren pasó a la secretaría técnica, donde se mantuvo hasta principios de 2009 -después de Bakero, tuvo como superior en la dirección deportiva a Salva Iriarte desde el verano de 2007 hasta mediados de enero de 2008-.

Durante este periplo, tuvo que lidiar con las desavenencias de Iñaki Badiola, que durante su etapa de presidente -del 4 de enero al 20 de diciembre de 2008- le postergó a un segundo plano pese a que el director deportivo que eligió, Pako Aiestaran, solo durase unos días. Hasta que Jokin Aperribay accedió al trono de Anoeta. Poco después de su nombramiento, el actual máximo mandatario de la Real le designó director deportivo el 28 de enero de 2009.

En sus ya casi nueve años en la dire-cción deportiva, Loren también ha sobrevivido a sus fichajes fallidos -Necati, Dramé, Johnatan Estrada, Songo’o, Sarpong, Mariga, Seferovic, Finnbogason...-, aunque, en este sentido, hay que incidir en que entre las sombras también se han visto luces, sobre todo en los últimos tiempos -Willian José, Juanmi y Rulli son los ejemplos más claros-.

Y en la última temporada también ha tenido que superar la nueva llegada de Olabe para hacerse cargo del apartado deportivo del club, aunque, por motivos desconocidos y sorprendentes, su aparición fue fugaz y Loren volvió al escalafón más alto del departamento.

Su condición de superviviente le permitirá, por tanto, permanecer una década, al menos, como máximo responsable deportivo de la Real. En el fútbol de hoy en día, toda una vida.