Unos científicos de la prestigiosa universidad de Harvard han creado lo que todo fan de Star Wars desearía tener entre sus manos, una espada láser real. Lo más curioso es que ha sido por accidente. Eso sí con algunas diferencias del original, leves matices sin importancia, como que por ejemplo no emite ese peculiar zumbido de sable láser y tampoco se puede cortar con ella. El efecto de la espada láser se originó cuando por accidente un equipo obtuvo fotones que permanecían juntos y formaban una molécula. Esta molécula es lo que se compara al "sable láser de un Jedi" moviendo las partículas de luz alrededor de una masa sólida.