En privado, desde Lehendakaritza aseguran que sería lógico que el consejero Juan Ignacio Pérez Iglesias informara el próximo martes al resto de integrantes del Gobierno sobre los contenidos que se abordaron en la conferencia de política universitaria. Es lo que suele suceder en estos casos dentro del funcionamiento normal y ordinario del Ejecutivo vasco. Por tanto, parece que, de manera natural, el calendario va a confluir hacia lo que plantea el socio de gobierno del PNV: los socialistas quieren que ese asunto se aborde en el Consejo de Gobierno pero, en su caso, lo piden con el objetivo de forjar una posición “unitaria”.
El pasado jueves, en la conferencia de universidades con el Gobierno español y otras comunidades, se trató el proyecto de modificación del decreto estatal 640/2021 que establece los criterios para crear esos centros de educación superior, sobre todo, con la mirada en los “chiringuitos” privados que se están diseñando en las comunidades autónomas dirigidas por el PP. Parece que no afectaría a la vasca Euneiz. Pero la parte jeltzale del Gobierno ha alertado ya de que esta propuesta supondría una invasión competencial y no quiere dar por bueno que se siente este precedente cediendo la competencia del Parlamento Vasco. El decreto atribuye al Estado la competencia sobre las universidades en línea, y también, por otro lado, exige un número mínimo de 4.500 estudiantes cuando algunas universidades que son referente en el mundo no alcanzan ese cupo.
El secretario general del PSE, Eneko Andueza, se desmarcó el jueves del rechazo del consejero y ha vuelto a hacerlo este sábado, de ahí el conflicto. La clave es que el PSE niega la invasión competencial, y presenta su apoyo al decreto como una defensa de la universidad pública frente a esos “chiringuitos” privados. Pero, en realidad, son dos planos diferentes: una cuestión es la defensa de la universidad pública, que puede ser algo compartido ampliamente; y otra es quién debe legislar al respecto y quién tiene la competencia. Basta con comprobar que el propio rector de la UPV/EHU, Joxerramon Bengoetxea, coincide con la filosofía del decreto y con la necesidad de fijar unos criterios mínimos para asegurar la calidad de las universidades de nueva creación, pero no comparte que se ceda la competencia al Congreso de los Diputados en las universidades en línea, y ve una invasión del autogobierno. Comparte las alegaciones del Gobierno vasco. Andueza pide abordar este asunto el martes en Consejo de Gobierno para que el Ejecutivo vasco de coalición PNV-PSE alcance una posición unitaria en torno a la defensa de la universidad pública.
Pero hay otro foco de discusión que tiene más que ver con la forma que con el fondo: la “coordinación” dentro del Gobierno que pide el PSE, que acusa al consejero de hacer un pronunciamiento unilateral sobre esta cuestión.
¿Esta controversia será una nueva tormenta en un vaso de agua, o la disputa tendrá recorrido? El propio Andueza dijo que “espera y desea” que se produzca un acuerdo. “Todos deberíamos compartir un objetivo común y, de no ser así, estaría muy extrañado. El único objetivo es proteger la universidad pública”, aseguró en la rueda de prensa posterior a la Comisión Ejecutiva del PSE para valorar su ronda con los partidos. Y, además, centró la polémica en una exigencia de “coordinación” previa para evitar que se repitan estas tensiones. También admitió que el propio consejero Pérez Iglesias ha sido rector de la UPV/EHU y habría que presumir que comparte la “finalidad” del PSE en defensa de la universidad pública.
"A título personal"
Aquí hay un matiz y es que, aunque en su intervención en castellano quiso dejar claro que no iba a discutir la “autoridad” del consejero, en euskera sí dijo que se ha pronunciado “a título personal”. Por ello, pidió “más coordinación” porque entiende que la posición “debe ser unitaria al respecto, por una cuestión operativa y para evitar tensiones”. Con ello, desliza que Pérez Iglesias no se encomendó a dios ni al diablo cuando se desmarcó de la propuesta de decreto y, a la vista de lo sucedido, parece evidente que no existía una sintonía previa con el PSE, pero sí la hay con la UPV/EHU, que comparte los criterios del consejero. EH Bildu también ve una invasión competencial. De ahí que la soledad no esté tanto en el flanco del departamento, sino en la incomprensión que puede causar la posición socialista en el ámbito universitario. La UPV/EHU comparte la filosofía del decreto estatal, pero ve una invasión competencial. La ministra, Diana Morant, es también socialista. Andueza reveló que habló con ella el viernes y opinó que “no hay ningún ánimo de invadir competencias, sino de proteger a la pública”.
¿Salud del pacto?
Habrá que esperar hasta el martes para saber si la sangre llegará al río, porque el propio Andueza dijo este sábado que va a aguardar hasta el Consejo de Gobierno para llamar o no al líder del EBB del PNV, Aitor Esteban, y plantearle un eventual fallo en la coordinación. “Esperemos al martes. Yo, cuando hablo de coordinación, hablo precisamente de estas cosas”, recalcó. Cabe recordar que, tan solo 24 horas antes de escenificar su discrepancia el jueves, Andueza se había reunido con Esteban, salió sin ninguna queja y deseó que el funcionamiento del pacto “siga siendo tan bueno como hasta ahora”. Por tanto, estaba satisfecho con la coordinación. De hecho, se le preguntó expresamente si había que mejorar los mecanismos de relación tras las últimas fricciones, como las del TAV, y aseguró que no se trataba tanto de eso sino de engrasar la relación porque hay nuevas caras, sobre todo, tras la renovación del PNV.
Esta dialéctica ya no sorprende. Los desencuentros del PSE con el PNV son cíclicos y es probable que se multipliquen en los dos años que quedan hasta las elecciones municipales y forales. El PSE quiere alcanzar mayores cotas de representación institucional y hacerse visible en la acción de gobierno, y el reto será que no afecte a la estabilidad del pacto. De hecho, en su rueda de prensa, Andueza aseguró que es el momento de ir más allá “de la gestión pura y dura” y de “transformar” tras una década de acuerdo PNV-PSE. “Euskadi ha estado siempre necesitada de pactos. Siempre hemos participado de ellos cuando han sido incluyentes y han estado dirigidos en la dirección correcta. No renunciamos a ellos, pero es imprescindible un impulso sin pérdida de tiempo en la política vasca”, dijo, con un críptico “pero” que está por ver en qué se traduce.
El martes, "normalidad y transparencia" en el Consejo de Gobierno
A pesar del carácter excepcional que han dado las palabras de Eneko Andueza a la información que pueda dar el consejero Juan Ignacio Pérez Iglesias sobre la conferencia de universidades en el Consejo de Gobierno, fuentes de Lehendakaritza consultadas por Grupo Noticias aclaran que la relación dentro del Ejecutivo es fluida y que las cuestiones se abordan “con total normalidad y transparencia”, sin necesidad de que surjan estas peticiones. Si algún consejero tiene alguna duda sobre esta cuestión, la puede plantear, algo que podría hacer alguno de los consejeros socialistas en la reunión del martes, “con la mayor normalidad y naturalidad, que es como funciona este Gobierno”. Todo apunta, en cualquier caso, a que el propio consejero informará del contenido que se abordó en la reunión del jueves con el Gobierno español y las comunidades autónomas. Este suele ser el procedimiento habitual. El primer Consejo de Gobierno tras la reunión del jueves pasado es el que tendrá lugar este martes.
El PSE, de todas formas, está poniendo el foco en que la información sobre la posición del consejero se tendría que haber consensuado antes de la conferencia. En este caso, de todos modos, esta cuestión viene de lejos, ya se enviaron unas alegaciones al Gobierno español que no tuvieron respuesta, y ahora mismo el Ejecutivo vasco tampoco se encuentra en el momento procesal de presentar un recurso judicial por invasión de competencias, ya que, por ahora, lo que hay sobre la mesa es una propuesta de modificación de decreto. Y habrá que ver en qué queda, si también se está encontrando con la oposición de las comunidades autónomas del PP. La propuesta no ha sido aprobada aún en Consejo de Ministros, algo que se prevé que suceda en junio, una vez obtenido el informe del Consejo de Estado. Por tanto, por ahora, el principal problema que tiene sobre la mesa el PNV es la queja de ausencia de coordinación por parte del PSE pero, de momento, los efectos prácticos de estas fricciones son limitados en vista del momento actual de la tramitación de la propuesta.