El consejero de Seguridad del Gobierno Vasco, Josu Erkoreka, no comparecerá ante la Diputación Permanente del Parlamento para informar sobre la muerte de un hombre ocurrida el 2 de febrero durante una intervención policial en Astigarraga.
La Mesa de la Diputación Permanente ha rechazado este lunes admitir a trámite la petición de comparecencia realizada por EH Bildu después de que este grupo tuviera conocimiento de los hechos a través de personas próximas a la familia que entendían que había habido "brutalidad" policial.
Comunicado
En un comunicado dado a conocer el pasado viernes, el Departamento vasco de Seguridad aseguró que "no consta denuncia alguna" en relación con estos hechos.
Contextualizó lo sucedido en una actuación en la que intervinieron la Policía Local y patrullas de la Ertzaintza que acudieron al lugar para "introducir" al posteriormente fallecido en una ambulancia con el fin de que fuera atendido ya que "presentaba un cuadro de lesiones autoinfligidas derivadas de su estado de exaltación".
Estado de exaltación
Tras recalcar que este individuo no fue detenido "en ningún momento", el Departamento de Seguridad aclaró que sí llegó a ser "inmovilizado por los agentes para evitar que continuara auto-lesionándose dado su estado visible de máxima agitación".
Julen Arzuaga
A pesar de estas aclaraciones, el parlamentario de EH Bildu Julen Arzuaga dijo que el consejero de seguridad "no se puede mantener en silencio ante estos hechos gravísimos", por lo que reclamó su comparecencia ante el Parlamento Vasco.
Tras la decisión de la Mesa de este lunes, Arzuaga ha dicho que la decisión que han tomado PNV y PSE-EE en este organismo para impedir la comparecencia es "especialmente dolorosa" y un "desprecio absoluto y una terrible falta de respeto a la familia".
Ha añadido que los partidos que sustentan al Gobierno Vasco han argumentado que no es urgente dar explicaciones sobre lo sucedido y se ha preguntado si la familia no merece saber con urgencia qué pasó.
Ha concluido que este caso se ha conocido porque la propia familia lo hizo público ya que, asegura en un comunicado, el Departamento de Seguridad "ha intentado ocultarlo desde el primer momento, vulnerando el principio de transparencia que es imprescindible en la actuación de una policía democrática".
