Una vez desatado el nudo de la Ley de Amnistía con los soberanistas catalanes, y las tres primeras transferencias de competencias con el PNV, el terreno queda totalmente despejado para que se acelere la negociación presupuestaria, el siguiente hito en la relación entre el Gobierno español y sus socios. El candidato del PNV a lehendakari, Imanol Pradales, constató esta evidencia este jueves en el desayuno de Forum Europa en Madrid cuando fue interrogado por el caso Koldo que afecta al PSOE, y por si el escándalo de la venta de mascarillas que afecta al asesor del exministro Ábalos va a provocar que el PNV se replantee su pacto con Sánchez. Pradales volvió a exigir una respuesta rápida y transparente a los socialistas, aunque admitió que este caso no es comparable con la trama Gürtel que puso en la picota la financiación del PP como partido. En cualquier caso, el PNV está mirando ahora a la negociación de los Presupuestos, el siguiente gran hito en su relación con el Gobierno español. 

“El Gobierno de Sánchez está necesitado de negociar con todos los partidos y somos partidos distintos, pero hemos sido capaces hasta la fecha de ir llegando a determinados acuerdos. Somos un partido institucional que apuesta por la estabilidad en Euskadi y en el Estado. Es un elemento que hay que intentar preservar. El siguiente hito es el trámite presupuestario y el Gobierno deberá llegar a acuerdos. Nosotros tenemos nuestras demandas en bienestar y mayores capacidades para Euskadi. Estamos fundamentalmente centrados en avanzar en el siguiente paso, la negociación presupuestaria”, dijo.

El "tacticismo" de Bildu

El candidato jeltzale también se refirió nuevamente al empate que auguran las encuestas entre PNV y Bildu, o la apuesta de Pello Otxandiano por dejar que gobierne la lista más votada, un debate donde Pradales repitió que la propuesta no es seria, que esta es una democracia parlamentaria y que le parecen “muy bien los anzuelos de Bildu” pero no ve más que “tacticismo electoral”. Sobre las huelgas en el sector privado, pero también en el público para el día 12 del presente mes de marzo, repitió que “la confrontación no ayuda” y que es “un mal camino” que la huelga sea un “recurso ordinario”. Por eso, apeló “a la cultura de las relaciones laborales y no de las confrontaciones laborales”.