El Parejas empieza calentito. La confección de las duplas no ha gustado nada a Unai Laso, que se ha llevado una sorpresa desagradable cuando se ha enterado esta misma mañana que Baiko le había asignado como zaguero a Aitor Aranguren, el cuarto en el escalafón de la agencia bilbaína tras Mariezkurrena, Albisu e Imaz. El de Bizkarreta-Gerendiain, que en la primera jornada -y en alguna más muy probablemente- causará baja por seguir recuperándose de la operación de cadera a la que se sometido el pasado mes de junio, ha hablado alto y claro, criticando la falta de apoyo que ha sentido por parte de sus superiores de cara a esta competición.
"No entiendo las parejas, no estoy de acuerdo. Me he quedado sorprendido. Había hablado con la empresa de que necesitaría más ayuda en la zaga en este campeonato, porque no saldré al cien por cien, pero no lo han tenido en cuenta", indicaba Laso, que insistía en liberar de la carga de sus críticas a su compañero: "No lo digo por Aranguren, voy a jugar a gusto con él, pero vengo de una lesión grave y muy larga y no me han ayudado". El subcampeón de las dos últimas ediciones del torneo junto a Imaz extendía su contrariedad a la configuración de otros binomios: "No me parece bien este formato. Las parejas de Aspe las veo mal. Han puesto al campeón (Aitor Elordi) con el segundo zaguero de la empresa (Rezusta), y Altuna, que sabemos el mejor pelotari, con Martija, una pareja muy dura, campeona en 2022 y una de las favoritas".
"Había hablado con la empresa de que necesitaría más ayuda en la zaga en este campeonato, porque no saldré al cien por cien, pero no lo han tenido en cuenta"
Es seguro que Laso se perderá la primera jornada, en la que será sustituido por Iker Larrazabal. Y no ve fácil que se incorpore en la segunda. "Iré viendo de semana a semana. De momento sólo he hecho un entrenamiento de parejas y ahora haré el segundo. Acabo las sesiones muy cansado. Intentaré mejorar eso. Aún ni siquiera hemos cumplido los plazos de seis meses. Saldré cuando yo me vea bien, no porque la empresa me meta presión. Por ahora no tengo plazos", asevera.
Además de por Laso-Aranguren, Baiko estará representada en el Parejas por Jaka-Mariezkurrena, Peña-Albisu y Artola-Imaz. El delantero de esta última combinación es la única cara nueva del cuadro respecto a la edición precedente. Cubre la vacante de Mikel Urrutikoetxea, a quien la agencia dirigida por Joserra Garai ni siquiera ha incluido como suplente de Laso para el arranque del torneo, papel que ha recaído en el joven Iker Larrazabal. Artola, que completó un verano notable y se quedó a dos tantos de meterse en las semifinales del Cuatro y Medio, estaba radiante por regresar al Parejas después de dos años apartado de él: “Tengo motivos para estar sonriente. Para mí, todos los años, el entrar en el Parejas es un objetivo. En los dos últimos años no he jugado ni de suplente y entiendo que estar de nuevo es el fruto y el premio a un buen trabajo”. Vuelve a formar sociedad con Imaz, con quien alcanzó el playoff hace cuatro años, en la edición de 2020. “Esa experiencia me hace confiar en que podemos ser una pareja competitiva. Él lo es. Estoy muy contento de jugar con él”, apuntaba el de Alegia.
Elezkano II, suplente de Altuna
Por parte de Aspe, los binomios confeccionados son Ezkurdia-Tolosa, Elordi-Rezusta, Peio Etxeberria-Zabaleta y Altuna-Martija. En este último dúo, como era ya sabido, el flamante tetracampeón del Cuatro y Medio causará baja durante varias jornadas, ya que quiere recuperarse totalmente de las molestias en el hombro que lleva arrastrando desde el verano. Danel Elezkano, un relevo de garantías con dos txapelas del Parejas en sus vitrinas, será quien le cubra las espaldas hasta su incorporación.
Por su parte, su víctima en la final de la jaula del pasado domingo, Peio Etxeberria, afronta este Parejas como un bálsamo para las heridas que le dejó la dura derrota encajada ante Altuna III (22-9): “Lo bueno que tiene esto es que cuando termina un campeonato, empieza otro. Estoy con muchas ganas y muy ilusionado con el que viene ahora”. Será su segunda participación, tras un debut irregular en la pasada edición con Rezusta como escudero: “Jugué a rachas, no le pude ayudar todo lo que quería a Beñat, pero me servirá de experiencia para este año y para intentar subir poco a poco”. En esta ocasión, contará a su servicio con un cañonero de la talla de Zabaleta, quien está encantado de jugar al lado del subcampeón del Cuatro y Medio. “Ha demostrado la calidad que tiene y está en un estado de forma buenísimo”, indicaba. Juntos forman un binomio temible, señalado por muchos entre los máximos favoritos a la txapela, aunque el zaguero de Etxarren cede esa vitola a Altuna-Martija: “Ya han sido campeones, sabemos la calidad que tienen y lo que suman juntos”.
"Lo bueno que tiene esto es que cuando termina un campeonato, empieza otro. Estoy con muchas ganas y muy ilusionado con el que viene ahora", dice Peio Etxeberria
Zabaleta conquistó en la pasada primavera el título del Parejas junto a Aitor Elordi, que encadenó ese éxito con la conquista del Manomanista. El de Mallabia sufrió las consecuencias de tanto trajín en verano con un desplome físico del que ya está recuperado: “Esa ha sido una etapa pasada, está comenzando otra y las sensaciones en los últimos partidos han sido muy buenas”. Su zaguero será esta vez Rezusta. “Tengo ganas de fortalecer ese feeling que tenemos entre los dos, esa relación que tienes fuera del frontón se refleja luego en la cancha”, dice.
La competición arranca este viernes en Azkoitia con el choque entre Ezkurdia-Tolosa y Peio Etxeberria-Zabaleta. El torneo, que mantiene su sistema de liguilla de catorce jornadas, playoff y semifinales, concluirá el 31 de marzo con la disputa de la final, un año más, en el Navarra Arena de Iruñea. Antes de esa cita cumbre, se celebrarán cuatro funciones en el Atano III de Donostia, que acaba de ser pintado de negro. “Queremos recuperar el protagonismo que ha tenido siempre este frontón en la pelota”, señalaba el director comercial de Aspe, Inaxio Errandonea.