LA primera propuesta es todo un clásico. Se trata de visitar el prácticamente milenario santuario de San Miguel in Excelsis de Aralar. De entre todas las posibilidades, Alberto Muro nos invita a partir desde Uharte Arakil, que también será el punto de llegada después de algo más de 6 kilómetros con su tanto de exigencia. A ritmo medio, alcanzaremos el templo después de una hora y cuarenta minutos. Por el camino ascendente, habremos encontrado roquedos, encinares, hayedos y pastos de montaña. Antes de la vuelta, quien ande sobrado de fuerzas y ganas podrá llegarse hasta la cercana cumbre de Artxeta. Como reto añadido, encontrar el escondidizo dolmen de Luperta. Mucho ojo con el tramo final de la bajada, que es espectacular.