DE aquellos polvos de Aquí hay tomate siguen cayendo lodos sobre Telecinco, emponzoñando un poco más su trayectoria. Allá por el 2004 se las prometían muy felices y lo mismo les daba hacer risas con los pantalones subidos hasta el sobaco de Julián Muñoz que quitarle con el photosop el biquini a las tenistas de moda. Y he aquí que el Supremo ratifica la condena a Telecinco por un reportaje en el que aparecían Anna Kournikova y Enrique Iglesias. Hablaban con mucho desparpajo de El desnudo del año. Un reportaje en el que dicen los jueces que se mostraron 8 imágenes manipuladas de la Kournikova. Eran tiempos en los que, al parecer, todo valía y estos lumbreras no veían ningún problema en desnudar por todo el morro a la novia del hijo de Julio Iglesias. Ahora le tienen que pagar 300.000 euros. Lo han oído bien. No sé en qué se han basado los jueces para determinar esta cantidad, pero entiendo que debería ser la misma para cualquier persona que haya visto vulnerados su honor e intimidad. Da la impresión de que esta pasta no se la darían a un mendigo sacado sin su consentimiento y al que le hubieran añadido un poco de inmundicia.

Pero seamos positivos. Saber y ganar es uno de los programas decanos de nuestra televisión. Es tal el pico de audiencia que da cada día que los responsables de la 2 de TVE han decidido prorrogarlo también el fin de semana. Y no está mal pensado ya que su horario en los días laborables hace que buena parte de su público objetivo no pueda seguirlo. Lo que no se termina de ver claro es el futuro de esta cadena en manos de un PP armado de tijeras. Cultura, entretenimientos educativos, ecología, solidaridad, flecos tentadores para dar el primer tijeretazo. Ojalá me equivoque.