El cambio más reseñable es la obligatoriedad de la baliza V16 conectada como único dispositivo válido para señalizar un vehículo inmovilizado en la vía desde el 1 de enero de 2026. Esto implica que los triángulos de preseñalización dejarán de ser válidos y que, en su lugar, será obligatorio llevar y utilizar una baliza lumínica conectada que comunique automáticamente la ubicación del coche a la plataforma de tráfico. Esta medida busca mejorar la seguridad en paradas forzosas en carretera y reducir accidentes en situaciones de emergencia.
El “pasillo de emergencia”
Una de las medidas más comentadas es la creación obligatoria de un pasillo central para vehículos de emergencia cuando se produzcan retenciones en autovías y autopistas. En la práctica, esto quiere decir que los vehículos del carril derecho deberían desplazarse hacia la derecha y los del carril izquierdo hacia la izquierda para dejar un corredor en medio por el que puedan circular ambulancias, bomberos o policía sin obstáculos.
Este comportamiento ha sido planteado por la DGT como parte de una reforma del Reglamento General de Circulación, pero a día de hoy no está publicado en el reglamento en vigor con todos sus detalles concretos.
Rebasar vehículos inmovilizados
Otro de los cambios que circula es el de cómo rebasar un vehículo inmovilizado que ocupa parcialmente un carril. La idea que se ha difundido es que, cuando eso ocurra, el conductor deberá reducir 20 km/h por debajo del límite de la vía y mantener una separación lateral de 1,5 metros. Por ahora, se mantiene como parte de las propuestas de reforma que la DGT ha comunicado y que es probable que se concreten en la modificación final del Reglamento si sigue adelante el proceso.
El cinturón de seguridad sin exenciones en ciudad
Otro cambio que ha generado ruido es la desaparición de ciertas exenciones del uso obligatorio del cinturón de seguridad en vías urbanas. Actualmente, profesionales como taxistas, repartidores o profesores de autoescuela tienen excepciones en determinadas circunstancias laborales que les permiten no llevar el cinturón. La DGT ha planteado eliminar esas exenciones en su proyecto de reforma para 2026, lo que significaría que el uso del cinturón en ciudad sería universal. Sin embargo, este punto también forma parte de la tramitación normativa y aún no se ha concretado como obligación de cumplimiento desde el 1 de enero.
Zonas de Bajas Emisiones
En 2026 no llega una nueva orden de la DGT sobre las Zonas de Bajas Emisiones, sino la aplicación de una obligación ya establecida en la Ley de Cambio Climático. Esta ley obliga a que determinadas ciudades (sobre todo aquellas con más de 50.000 habitantes) implementen ZBE para restringir el acceso a la circulación y el estacionamiento de vehículos más contaminantes. El criterio principal para establecer estas restricciones gira alrededor de la etiqueta ambiental de la DGT, que clasifica los vehículos en función de sus emisiones.
Las sanciones por no respetar estas restricciones pueden llegar a multas de hasta 200 euros, aunque cada ayuntamiento define dónde, cuándo y cómo se aplican esas limitaciones dentro de su zona.
