En verano, millones de personas intentan coger el coche para pasar el día en la playa. Es la mejor época del año para disfrutar del sol, de las temperaturas agradables y el mar, en buena compañía y al aire libre. Aun así, existen despistes que pueden traer errores fatales para los conductores.
Hablamos de las multas por aparcar en ciertos lugares, sobre todo en zonas de la costa. La normativa alerta de que en algunas zonas está terminantemente prohibido estacionar, con infracciones que pueden salir caras.
Aparcar en la playa
Se trata de aparcar en la playa. Según indica el artículo 33.5 de la Ley de Costas, queda prohibido estacionar y circular vehículos en las playas. El objetivo de esta medida sirve para mantener en buen estado los espacios naturales, y más aquellos amenazados o en peligro.
La normativa explica que las multas son de entre 50 y 150 euros; pero en el supuesto de que el vehículo esté en un espacio natural protegido o en peligro, la sanción podría ser de hasta los 6.000 euros.
Porque, además de contaminar o ensuciar el entorno, también supone una moelstia en el ecosistema para diversas especies, tanto de flora como de fauna. Por no hablar de que, si fuese legal, muchos conductores optarían por hacer lo mismo y se desataría el caos.
Cuidado con los accesos
Más allá de la arena o el litoral, aparcar en los accesos y caminos que llevan a las playas es una costumbre que también queda prohibida dentro de la legislación. Es decir, estacionar el vehículo en las inmediaciones del arenal.
Por ese motivo, hay que atenerse a las normas de cada municipio. Los ayuntamientos pueden regular la entrada y salida de los automóviles a estas áreas, por lo que cada playa puede tener normas específicas que se deben respetar.
Para evitar problemas, la mejor solución es dejar el coche en aparcamientos o en zonas autorizadas por las instituciones locales. De lo contrario, existe un riesgo muy grave de sufrir una infracción, por pequeña que sea.
Los mejores lugares para aparcar en verano
Dejando a un lado los típicos aparcamientos donde estacionar el coche, otro remedio es dejarlo en áreas especiales donde haya personal y horarios determinados. Si no, aparcar el vehículo en una calle de la ciudad e ir andando hasta la playa es otro remedio.
Como último recurso, tener el coche en un parking de pago de forma temporal, es de gran ayuda. O, en su defecto, moverse en transporte público para llegar al destino de playa, mirando los horarios de ida y vuelta.
La Ley de Costas
La Ley de Costas es una normativa que busca conservar y proteger los litorales, al igual que sus accesos y asegurar el orden en estas zonas, evitando construcciones de inmuebles y cualquier otra alteración.
Asimismo, esto se refiere a las dunas, marismas y otros espacios cercanos, con el permiso de habilitar zonas protegidas o en peligro que puedan garantizar el cuidado del medio ambiente.
Como es de imaginar, esta normativa también atañe a la circulación de vehículos y las acciones que estos pueden realizar en los arenales y sus inmediaciones.