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Mesa de Redacción

Ander Terrones

Hicham

Parece que un migrante pobre, para ser válido y aceptado por la sociedad, debe dejarse explotar en trabajos duros y mal pagados o salvar a gente

HichamJavier Colmenero

Hace un par de semanas saltó a los medios la noticia de que un migrante marroquí sintecho, llamado Hicham Badraoui, había rescatado a una persona que se estaba ahogando en la playa de La Concha. Al hilo de este hecho y su repercusión, se me ocurrieron unas cuantas reflexiones.

Por un lado, que parece que un migrante pobre, para ser válido y aceptado por la sociedad, debe dejarse explotar en trabajos duros y mal pagados o salvar a gente. No deja de ser una forma colonial de ver a las personas que vienen aquí, donde para ser uno más tienes que pasar unas pruebas, como si el hecho de ser humano no fuera suficiente.

Y, por otro lado, algo que pasó bastante desapercibido en el relato de Hicham es que lleva desde 2023 para conseguir un permiso de trabajo y de residencia y que está a pocos meses de obtenerlo.

Se les pide que se integren, les exigimos los mismos deberes que a cualquier ciudadano o ciudadana nacional, pero sin embargo necesitan dos años para tener un derecho tan básico como el del trabajo.

No parece que se estén haciendo muy bien las cosas cuando una persona tiene que vivir en la calle tantos meses para poder hacer algo tan básico como trabajar legalmente. Supongo que algunos preferirán que estén sin papeles para poder usarlos como esclavos a su servicio.