Fernanda tiene todo el cuerpo dolorido. La llevaron a unos matorrales. Los atacantes la violaron por turnos. La agresión se prolongó durante tres horas. “Han entrado en la tienda, nos han golpeado, me han puesto un cuchillo en la garganta diciendo que nos iban a matar, y a ella la han violado siete hombres”, cuenta el marido desde el hospital. Los acusados, al parecer, todos de entre veinte y treinta años, también les robaron. “Teníamos muy poco, su verdadero motivo era violarme”, asegura la ciudadana española de origen brasileño que ha sido víctima de una agresión sexual grupal en una zona remota al noroeste de la India, un suceso que está dando la vuelta al mundo. Estos hechos conocidos este pasado fin de semana han coincidido con el estreno en Netflix de No estás sola: La lucha contra La Manada, un interesante documental cuyo punto de partida es precisamente la agresión sexual que sufrió una joven en los sanfermines de 2016 por parte de cinco hombres. Un caso que se entrelaza con el de una segunda víctima de La Manada en Pozoblanco, y el de Nagore Laffage, asesinada en los sanfermines de 2008. Historias que se van entretejiendo, arrojando luz sobre la violencia sexual que viven las mujeres a diario. Hechos delictivos que no conocen fronteras.
