Hace ya unos meses que el primer ministro británico, Rishi Sunak, anunció sus planes para prohibir la raza de perro American Bully XL. ¿El motivo? Los varios sucesos que se han ido registrando en el Reino Unido con ataques de este animal.
“El American Bully XL es un peligro para nuestras comunidades, particularmente para los niños”, declaró Sunak en un vídeo publicado en X (antes Twitter) en el que ordenaba a sus ministros que trabajasen con las autoridades pertinentes primero para “definir” las características de la raza y eventualmente para prohibirla.
Desde el 31 de diciembre de 2023, es ilegal vender, regalar o criar un American XL Bully en Reino Unido. Sin embargo, no ha sido hasta este 1 de febrero que poseer uno de estos perros se ha convertido en un delito penal en el país.
Ahora, los ciudadanos británicos que tengan uno y quieran conservar a sus mascotas deberán solicitar una exención, que exige tener un seguro de responsabilidad civil, una prueba de esterilización y pagar una tasa de 92,40 libras (108, 14 euros). Además deberán llevar a los canes en público amarrados y con correa.
