Joxean Etxeberria y Jokin Urretabizkaia –Basozabal– han cerrado este viernes una puesta con 4.000 euros en juego por cada lado, que se resolverá el próximo 8 de marzo en el frontón Ezkurra de la localidad navarra de Doneztebe (18.00 horas). El baztandarra y el donostiarra tendrán que hacer frente entonces a un durísimo trabajo sobre doce kanaerdikos y seis troncos de 60 pulgadas.
Etxeberria había retado a cualquier aizkolari que no fuera Iker Vicente, Mikel Larrañaga, Julen Alberdi, Eneko Otaño o Hodei Ezpeleta a realizar una apuesta con él. Hace unos meses, el de Ziga también intentó acordar un desafío, pero entonces se dirigió únicamente a todos los aizkolaris navarros, con la excepción de Vicente. Aunque Ibai Soroa se mostró interesado, los dos deportistas no lograron encontrar una fecha favorable a ambos.
Etxeberria esperó ayer a un posible rival en el restaurante Kantabriko de Tolosa, y en esta ocasión fue Basozabal quien se presentó. El donostiarra y el navarro negociaron durante cerca de hora y media los términos de la apuesta hasta alcanzar el acuerdo.
En primer momento, Etxeberria propuso cortar doce oinbikos –troncos de 53,1 centímetros de diámetro–, mientras que Basozabal quería que fueran doce maderas de 60 pulgadas –de 44,3–. Finalmente, ambos estuvieron de acuerdo en cortar doce kanaerdikos, de 39,8 centímetros de diámetro, y seis troncos de 60 pulgadas. Etxeberria será el encargado de llevar a la plaza los doce kanaerdikos, mientras que Basozabal se ocupará de los troncos de 60 pulgadas.
No será la primera apuesta para ninguno de los dos. En 2019, Basozabal se embolsó 3.000 euros tras vencer al oiartzuarra Jon Larrañaga en una apuesta mixta de aizkora y sega. También Etxeberria ha disputado varios desafíos. El más sonado fue tal vez el que sostuvo ante el zumarragarra Xabier Zaldua en 2017, que consistió en cortar diez kanaerdikos y correr durante diez kilómetros, y que terminó con una clara victoria del navarro.
Etxeberria y Basozabal se enfrentaron recientemente en el último Campeonato de Euskal Herria, donde el donostiarra superó al navarro en casi un minuto.