La línea de Bus Eléctrico Inteligente (BEI) que se implantará en el trayecto 17-Gros-Hospitales, deberá conseguir una buena intermodalidad con la estación del Topo en Anoeta y adecuarse con las obras del vestíbulo de esta parada. Esta es una de las condiciones señaladas por el Gobierno Vasco, que aportará un 65% de la elevada inversión del proyecto, que se acerca a los 27 millones de euros y podría ser una realidad en 2025.

La implantación de esta línea sin emisiones no solo consistirá en colocar autobuses 100% eléctricos, sino que estos tendrán mayor capacidad, ya que serán de 18 metros. Además, todo el trazado por el que pasará la línea, entre Gros y la zona Hospitalaria, deberá tener prioridad semafórica y contará con paradas especialmente diseñadas para que los autobuses entren y salgan rápido, además de otros detalles técnicos, que deben tenerse en cuenta en el diseño.

Así lo explicó este martes el alcalde de Donostia, Eneko Goia, tras la aprobación de un nuevo convenio de colaboración con el Ejecutivo Vasco para la ejecución de este proyecto, que antes estaba previsto encargar a ETS. Una buena conexión de la línea inteligente 17 con una estación del Topo se considera ahora imprescindible ya que el barrio de Gros, al que da servicio la línea 17, queda fuera del nuevo trazado del Topo que se construye bajo el centro de Donostia. “La construcción del Topo queda fuera del ámbito de Gros y para mejorar el transporte público es necesaria esta conexión”, dijo Goia.

La Junta de Gobierno ratificó nuevo el acuerdo con Lakua, que varía respecto al anterior, recientemente anulado. Ahora, será el Ayuntamiento de Donostia quien se encargue de llevar a cabo los anteproyectos y proyectos necesarios para poner en marcha la línea inteligente. Experiencias como la llevada a cabo en Vitoria han llevado a ambas instituciones a optar por que sea el propio Consistorio quien se responsabilice de los proyectos, ya que se entiende que la institución local conoce con mayor detalle las cuestiones urbanas de la ciudad. “El nuevo convenio establece que será el Ayuntamiento quien lleve a cabo la redacción de estudios, anteproyectos y proyectos relativos a la implantación del Bus Eléctrico Inteligente en la Línea 17 de Dbus”, señaló el alcalde.

Así, el Consistorio donostiarra se compromete a redactar el proyecto asegurando la intermodaliad de la línea 17 con la pasante del Topo en la parada de Anoeta y a colaborar técnicamente en el proceso de elaboración de los estudios, anteproyectos y proyectos, así como a coordinar las obras con las del nuevo vestíbulo de la estación de Anoeta.

El acuerdo fija las consignaciones presupuestarias necesarias para los ejercicios 2022, 2023, 2024 y 2025 de ambas instituciones. El Ayuntamiento deberá aportar el 35% del coste, lo que asciende a 8.995.000 euros, y el Gobierno Vasco, 16.705.000 euros.

Recientemente, el Consistorio aprobó modificar los créditos aprobados en marzo para la implantación de la línea de Bus Eléctrico Inteligente. El nuevo calendario prevé un gasto en 2022 de 140.000 euros; en 2023, 273.000; en 2024; 7.280.000, y en 2.025, 1.302.000.

Las calles de Donostia acogieron en el año 2018 un autobús eléctrico articuladoun autobús eléctrico articulado como campo de pruebas para este tipo de vehículo de transporte público.