donostia - Donostia será la ciudad encargada de probar el primer autobús articulado 100% eléctrico fabricado por la empresa Irizar. El nuevo modelo, bautizado como Irizar ie tram, tiene 18 metros de largo y será destinado a la línea 28, Amara-Hospitales, el trayecto de autobús urbano que más viajeros registra al año en Euskadi. Además, el recorrido discurre parcialmente en cuesta, lo que permitirá probar mejor las prestaciones del nuevo vehículo de transporte de viajeros.

Este autocar, además, no se cargará por la noche, como sucede con los actuales autobuses eléctricos que utiliza la empresa Dbus, sino que empleará la denominada carga de oportunidad, que aprovecha las paradas para reponer la energía eléctrica. En concreto, está previsto que la parada final del recorrido Amara Hospitales, la situada Miramon, sea el punto de recarga. Para ello, el autobús Irizar ie tram dispone de un pantógrafo en el techo que se despliega para poder efectuar el repostaje eléctrico desde un poste de 500kW de potencia. La carga estimada en parada tiene una duración aproximad de 5-6 minutos.

El modelo de autobús fue conocido ayer por el alcalde, Eneko Goia, que acudió a las instalaciones de la fábrica Irizar en Aduna en compañía de la concejala de Movilidad, Pilar Arana y del director gerente de Dbus, Igor Gonzalez, con el fin de ver in situ los detalles del nuevo vehículo desarrollado en Gipuzkoa.

Tras verlo, Goia manifestó que Irizar “sigue utilizando a Donostia como laboratorio de sus diseños más innovadores, en una alianza estratégica que nos sitúa a la ciudad y al territorio en la vanguardia mundial de la movilidad eléctrica”. Asimismo, añadió que la capital guipuzcoana “tiene una estrategia completa de apuesta por el vehículo eléctrico en todas sus modalidades, para lo que se van a ir dando pasos encaminados a sustituir los carburantes fósiles por energías limpias”.

desde verano El vehículo en pruebas empezará a utilizarse en verano y su periodo de análisis durará seis meses, según el acuerdo entre Dbus y la empresa Irizar. El uso del nuevo autobús dentro de la flota de Dbus forma parte de un proyecto piloto que promueve el aumento de la movilidad eléctrica en la capital guipuzcoana. La línea 28 servirá precisamente de campo de pruebas para esta experiencia que tiene como objetivo extenderse al resto de la ciudad. El proyecto piloto de autobús eléctrico articulado es el primer paso para la electrificación de la totalidad de la línea 28.

No es la primera vez que Donostia sirve de escenario de pruebas para los nuevos vehículos eléctricos de transporte público que desarrolla la firma Irizar. En 2014 Dbus fue el primer operador del Estado que probó el autobús eléctrico de 12 metros fabricado por Irizar, el primer vehículo de estas características desarrollado en Europa.

Desde entonces la empresa de transporte público donostiarra ha ido incorporando tres autobuses 100% eléctricos así como una veintena de híbridos, que funcionan con tracción totalmente eléctrica y en paradas permanecen en modo cero emisiones.

La utilización del nuevo modelo articulado en la línea 28 evitará la emisión de 120 toneladas de CO2 a la atmósfera, según los cálculos de Dbus.

Las pruebas previstas con trayectos reales con viajeros permitirán obtener datos concretos sobre el consumo energético de la línea 28 y dimensionar todos los elementos necesarios para la posible incorporación de autobuses eléctricos dotados de sistemas inteligentes (sistemas BEI-Autobús Eléctrico Inteligente).

otros vehículos Pero la movilidad eléctrica no solo afecta al transporte público en la capital guipuzcoana. Otros vehículos municipales también se han pasado a la energía limpia. Recientemente, el Ayuntamiento adquirió tres nuevos vehículos eléctricos para el departamento de Mantenimiento Urbano, gracias a las ayudas del proyecto europeo Replicate. Los tres coches, de la marca Citröen, se han dedicado a tareas de vigilancia urbana. Otro cuarto vehículo eléctrico, de marca Kia, se destina al transporte de los miembros de la Corporación donostiarra.

Con los nuevos coches eléctricos, el 13% de la flota municipal funciona sin combustibles fósiles. Estos turismos utilizan el parque móvil municipal, situado en Ibaeta, para llevar a cabo su recarga nocturna.

Por su parte, la Guardia Municipal también está cambiando sus viejos coches de gasoil por otros menos contaminantes. En la pasada primavera adquirió cuatro nuevos vehículos híbridos, que se destinan a las patrullas de seguridad, con lo que estos autos ya llegan a la cifra de 18.