El final del otoño y el invierno no son una buena época para los ciclistas. El frío y la lluvia hacen que salir a la carretera sea muy desapacible e incluso más peligroso de lo habitual. Además, anochece muy pronto. Pero a grandes males, grandes remedios. Los de Donostia y alrededores pueden echar mano del velódromo de Anoeta... y los de Urola Garaia del mercado de Zumarraga. Los chavales de la escuela de ciclismo de la sociedad deportiva Goierri entrenan en el mercado los días de mal tiempo, aprovechando que es un lugar totalmente cerrado, seco, bien iluminado y con unos postes en medio que marcan el circuito. No se puede coger mucha velocidad, pero es ideal para hacer ejercicios que ayudan a desarrollar el equilibrio y la habilidad sobre la bicicleta.
- Multimedia
- Servicios
- Participación