Irun afronta meses decisivos para la definición de dos grandes proyectos deportivos. Uno, de mayor presencia pública visto el interés que suscita entre la ciudadanía y en distintos clubes de la ciudad, es el multiusos de Ficoba; y el otro, con tres décadas de retraso, el traslado de las pistas deportivas de Plaiaundi a Txenperenea.

La diputada general de Gipuzkoa, Eider Mendoza, y la alcaldesa de Irun, Cristina Laborda, citaron ambos proyectos en la comparecencia que ofrecieron tras su reunión del martes. La cita dejó una sintonía que cristaliza en proyectos como la residencia de Arbes, cuya construcción arrancará en pocas semanas; en el plan de mejora de las carreteras de la comarca y en la implicación de la Diputación para dar forma a los futuros proyectos de Via Irun.

El cuarto y último eje que ambas dirigentes explicitaron a las puertas de Gordailua, el centro de conservación del patrimonio foral donde se reunió el Consejo foral en su cita semanal, fueron las instalaciones deportivas. Destacan dos: el pabellón multiusos de Ficoba y el traslado de las pistas de rugby y atletismo desde Plaiaundi a Txenperenea.

Respaldo político

Ambos planes, que asoman y desaparecen del foco público como dos Guadianas, concitan el visto bueno de las Juntas Generales, como concretaron en el Pleno de marzo. En él aprobaron una resolución en la que instaron a las instituciones a un acuerdo de financiación en los siguientes seis meses para instalaciones en cuya necesidad hay plena coincidencia.

Han volado esos seis meses y no ha habido novedades. La financiación es el mismo gran escollo de ambos proyectos. En el proyecto de Txenperenea, la pelota estaba sobre el tejado foral después de que al comienzo del verano el Ayuntamiento le remitiera un nuevo proyecto para el equipamiento deportivo; mientras que en el caso del pabellón multiusos, el liderazgo corresponde a la esfera local, que acaba de encargar el plan director que alumbrará el modelo de gestión de la hipotética instalación. Ya está adjudicado el estudio de alternativas y el proyecto básico que dará forma a la infraestructura que más allá de las grandes directrices, podría guardar en su aspecto definitivo poca relación con los bocetos conocidos hasta la fecha.

Recuperar Plaiaundi

Para desesperación y hartazgo de los y las deportistas, el debate de la ubicación de las instalaciones de atletismo y rugby fue intenso. En diciembre de 2018, el PNV, EH Bildu y Elkarrekin Podemos-IU aprobaron la ubicación de Txenperenea, junto a la nueva salida de la AP-8 y el comienzo de la Ronda Sur en Oñaurre. El PSE mostró su disconformidad con esta elección ya que prefería otro emplazamiento, sobre todo por razones económicas.

Desde entonces, el Ayuntamiento ha dado pasos administrativos para dar forma a la instalación de Txenperenea, que iría acompañada de un desarrollo de equipamientos y residencial. El último, ya con el PNV dentro del Gobierno municipal, fue remitir a la Diputación a comienzos de verano un boceto que consideran definitivo y del que esperan respuesta foral.

Aún faltan dos grandes pasos: la redacción del proyecto definitivo, para el que el Ayuntamiento ya tiene asignada esta partida en su presupuesto; y, sobre todo, atar una financiación que ahora mismo escala a los 19 millones.

Instalaciones de Plaiaundi, con el foso de longitud en primer plano. Ania M. Seisdedos

El eterno traslado de las pistas de Plaiaundi, que como la semana pasada recordó la asociación Eguzki es un objetivo de primer orden habida cuenta del valor natural del parque, tuvo su primer hito en 1993.

Aquel entonces, las instituciones acordaron un convenio (que debe ser renovado) según el cual, la Diputación afrontaría la mitad del coste, el Gobierno Vasco un 30% y el 20% restante, el Ayuntamiento.

Esa financiación sigue sin estar atada, pese a los seis meses de la resolución de las Juntas. Con ese plazo a punto de agotar, la bancada de EH Bildu en las Juntas preguntó por el cumplimiento de aquella resolución a la Dirección de Deportes foral, en manos del PSE.

En su respuesta por escrito, el área que encabeza Goizane Álvarez avanza que “en las próximas semanas” compartiría “los avances” sobre Txenperenea con las instituciones implicadas.

Suelo de Txenperenea donde están previstos proyectos de nuevas instalciones deportivas. Ruben Plaza

La respuesta foral

“La Dirección de Deportes evaluó la propuesta para determinar, por un lado, si realmente podía considerarse un traslado; y, por otro, en qué medida daba respuesta a las necesidades planteadas”, explica el área, que defiende que esa evaluación quería “servir de base para orientar el rumbo del proyecto y su futura financiación”.

A tenor del ajuste presupuestario que se dibuja en el horizonte visto el contexto de incertidumbre general (y que puede afectar a este tipo de iniciativas, incluidas las dos citadas), la Diputación defiende que “todo proyecto se debe actualizar conforme a criterios de uso responsable del gasto público, adecuación a la finalidad establecida y máxima funcionalidad de los recursos disponibles, en una estrategia y dimensión de territorio”.

“Este proceso se desarrolla en el marco de un diálogo interinstitucional en el que compartiremos en las próximas semanas los avances en materia del proyecto que nos ocupa”, se refiere el departamento a EH Bildu sobre todo a Txenperenea, que es el proyecto sobre el que debe respuesta. Que se resuelva cuanto antes es la exigencia de atletas y rugbiers hartos de esperar.

A juicio de la Diputación, “solo de este modo será posible abordar la concreción de un compromiso financiero detallado y plenamente transparente. Todo ello se sitúa en el contexto de negociación y racionalización presupuestarias que, de forma natural, caracteriza el otoño político en todas las Administraciones Públicas”.

El multiusos: ser o no ser, esa es la cuestión

Con la pelota en el tejado municipal, como recordó la diputada general el martes al subrayar la responsabilidad local en un proyecto que “está empezando”, el pabellón multiusos de Ficoba, también denominado IAM, afronta unos meses decisivos.

En su caso, dos herramientas como el plan director y el proyecto básico —que incluso examinarán la necesidad o no del citado IAM— deben aterrizar una iniciativa que el PSE lanzó en 2022 en plena precampaña electoral.

Este movimiento generó suspicacias por sus formas en otros grupos, aunque sucesivas declaraciones públicas han constatado que existe un consenso sobre responder a las necesidades existentes en la ciudad.

La realidad no engaña: con la ampliación del polideportivo de Azken Portu en el limbo, los 65.000 habitantes de Irun solo cuentan con una única pista polivalente reglamentaria cubierta (la de Artaleku, inaugurada en 1987).

En la actualidad no hay tanta reticencia como al principio con el nombre de IAM que impulsaron los socialistas, pero sí hay una coincidencia —sobre todo fuera del PSE— en la necesidad de definir el proyecto y ajustar el concepto del multiusos, de acuerdo a los usos deportivos, sí, pero teniendo en cuenta la posible ampliación de Ficoba y los usos culturales.

Artaleku vibra con un triunfo del Irudek Bidasoa Irun reciente Arnaitz Rubio

El Bidasoa... y más clubes

El CD Bidasoa, que ya fue motor de la cubrición del frontón Uranzu a mediados de los 70 y de la construcción del polideportivo Artaleku en 1987 —ambas, como ahora, azuzadas por exigencias federativas—, es uno de los agentes que solicita renovar las actuales o construir nuevas infraestructuras deportivas, pero no es el único.

El crecimiento del primer equipo bidasotarra y su habitual presencia europea le llevan a nuevos escenarios, sí, aunque la preocupación de la entidad —cada vez más creciente a pie de grada, en su masa social— mira mucho a su cantera. Una demanda compartida por otros clubes de la ciudad, tanto de balonmano, baloncesto o fútbol sala, entre otros: todos echan en falta pistas para tener horas de entrenamiento.

En un proceso que debe liderar el Ayuntamiento, como han recordado Mendoza esta semana y Goizane Álvarez en una entrevista meses atrás, medio año será suficiente para ver si Irun dispondrá de un multiusos, y si este estará más definido que el anteproyecto elaborado en marzo de 2023 por encargo de Alcaldía. Las previsiones entonces eran un proyecto de 43 millones de euros…

Aterrizar el proyecto es lo que tanto la Diputación como el Gobierno Vasco reclaman para concretar una financiación en la que el Consistorio quiere implicar también al CSD con motivo de la fase final del Mundial de balonmano femenino de 2029.

Más cerca queda 2029 que todo un campeonato mundial de balonmano femenino, aunque para ambas las instituciones deberán despejar casi de inmediato incógnitas que también afronta el traslado de Plaiaundi a Txenperenea. Concretar los proyectos será rematar la financiación. Y despejar ambos caminos.