La parroquia de Santa María La Real acogerá el estreno de Azkoitiana II, una composición del organista alemán Jürgen Essl a la que el joven organista catalán Pol Álvarez dará forma hoy a partir de las 18.00.
El origen de la obra está en un recorrido por los órganos de estilo romántico de Gipuzkoa que llevó a cabo el compositor alemán en 2022. Durante su paso por Azkoitia quedó cautivado por el sonido tan natural y auténtico del órgano Cavaillé-Coll, y sintió la necesidad de componer una obra específicamente escrita para ese espectacular instrumento. “Los órganos románticos de Gipuzkoa tienen la particularidad de que mantienen la esencia de su sonido original. Otros han sido restaurados y electrificados, adecuando su sonido al gusto de la música de la posguerra. Los que se conservan en Gipuzkoa mantienen su sonido sin apenas cambios y son los más adecuados para tocar la música romántico-francesa. Visitamos varios de esos órganos, pero fue el de Azkoitia el que más le impresionó. Estuvo improvisando y se emocionó. De allí a unas semanas decidió componer algo para plasmar la inspiración que sintió tocándolo”, señaló Pol Álvarez, en un alto del ensayo.
Aquel impulso dio lugar a una primera obra titulada Azkoitiana, que el joven músico de Terrassa estrenó en Usurbil en marzo. Ahora llega la segunda parte, una pieza titulada Azkoitiana II, que Pol Álvarez, alumno de Essl en la Universidad de Música y Artes Escénicas de Stuttgart, estrenará esta tarde. Interpretará ambas piezas en un concierto que incluye también piezas de César Franck y Bach, y será una oportunidad de disfrutar del virtuosismo de Álvarez y conocer el impulso creador de Essl. “Su música parte de la libertad, lo que la hace difícil de interpretar. Intenta que todo suene natural, como si fuera improvisado. Pocas personas pueden improvisar como él y el resultado es una serie de secuencias que se repiten como un caleidoscopio en el que distintos elementos se cruzan y repiten dando lugar a colores distintos. Lo que hace en Azkoitiana I y en Azkoitiana II es experimentar con la paleta de colores del órgano Cavaillé-Coll a partir de ese sentimiento de improvisación”, terminó diciendo el joven músico catalán.