El plan de reformas que se está llevando a cabo en el barrio de la Magdalena sigue adelante. En esta ocasión el proyecto en cuestión es el que irá dirigido a la creación de un espacio dominado por la presencia de ejemplares de la flora autóctona en la ladera situada en la parte posterior de la ermita que le da nombre. Su objetivo, tal y como han señalado desde el Ayuntamiento de Azpeitia, será convertir el área en un museo vivo, abierto a las visitas por parte de la ciudadanía, que tendrá la doble finalidad de reforzar la conciencia medioambiental frente al cambio climático y poner en valor la vegetación forestal autóctona.
El Ayuntamiento de Azpeitia ha adquirido varios bloques de viviendas alrededor de la ermita en los últimos meses para derribarlos e incorporar ese espacio al proyecto de reforma urbana de la zona. Ahora ha dado un nuevo paso promoviendo un proyecto para la recuperación del suelo público en pendiente ubicado en la parte trasera de la ermita de la Magdalena. Se trata de un proyecto que cuenta con un presupuesto de 48.023,20 euros y será ejecutado por la Diputación Foral de Gipuzkoa una vez sea aprobado.
El Ayuntamiento ha tomado en consideración la propuesta de Urola Bizirik de aprovechar ese espacio para plantar especies vegetales autóctonas y crear un espacio de sensibilización medioambiental en el desarrollo del plan. A partir de esta idea, se ha diseñado un proyecto que aboga por la plantación de especies arbustivas locales con el fin de acelerar la recuperación del terreno, y la restauración de la estructura de flora autóctona. También se contemplan labores de recuperación de la cultura del paisaje en los huertos vecinales, medidas de plantación para la expansión del robledal y, finalmente, la generación de un manto superficial permeable y lo más blando posible.