Un espectáculo de luz, música, canciones y danza inundó el frontón Gurea la noche del sábado en la fiesta del 50º aniversario de la ikastola Xabier Munibe. La efeméride hizo que el frontón azkoitiarra se quedara pequeño. Fueron cientos las personas que abarrotaron sus gradas para sumarse a la celebración, y cientos también las que desfilaron por el escenario para bailar, cantar y, también, para recordar las cinco décadas de andadura de la ikastola azkoitiarra. El público, entre los que hubo ocasión de ver a las primeras profesoras del centro, se divirtió y emocionó en una celebración en la que no faltó el recuerdo a aquellos primeros años en los que la ikastola era poco más que un sueño. A partir de ahí se sucedieron por espacio de algo más de una hora, bailes y canciones, incluida la del 50º aniversario, a los que dieron forma alumnos de antes y de ahora de la ikastola, llenando de emoción y alegría el frontón Gurea.

Este encuentro puso el cierre a una celebración a la que no le han faltado contratiempos. El 50º aniversario debería haber tenido lugar en 2020 pero el covid-19 se cruzó en su camino y obligó a aplazar los festejos a la espera de que la pandemia diera un respiro. Superada la crisis, se decidió que la gran fiesta final tuviera lugar el 13 de mayo pero, en este caso, fueron los malos pronósticos del tiempo los que obligaron a cambiar los planes y a posponer la fiesta al 20 de mayo. A ese cambio de fecha se le han sumado en esta ocasión unas previsiones meteorológicas que no invitaban al optimismo, por lo que, finalmente, se optó por trasladar la celebración, prevista inicialmente en la plaza, al frontón Gurea. Muchos cambios y muchas vicisitudes, pero todo ha merecido la pena para disfrutar de la gran fiesta que se vivió en el frontón Gurea la noche del pasado sábado.