El último Pleno celebrado en Lasarte-Oria adjudicó por unanimidad las obras de reurbanización de los bajos de Erribera, del barrio de Zumaburu.

A la licitación se presentaron tres UTES. Analizadas las propuestas, la obra se adjudicó a la UTE Erribera, por ser la más ventajosa económicamente, formada por Campezo Obras y Servicios y Jaizubia Obras y Servicios por 3,58 millones de euros (IVA incluido) y tiene un plazo de ejecución de quince meses desde la firma del contrato.

Por tanto, si todo avanza sin contratiempos, los trabajos podrán arrancar en unas semanas y finalizar a mediados de 2024.

Según recordaron desde el Consistorio, con esta obra se buscan varios objetivos, todos ellos encaminados a mejorar la calidad de vida del vecindario.

En primer lugar se adecuará la urbanización de este espacio para albergar los usos de paseo y de bidegorri, dando de este modo continuidad a esta infraestructura a lo largo de toda la ribera del río Oria en el municipio.

A ello se sumará la mejora de las condiciones de urbanización del ámbito, adecuándolas a las del resto de la población. Así las cosas, se renovará el alumbrado, sustituyendo las luminarias existentes por otras de tecnología LED, alcanzando unos grados de iluminación netamente superiores a los establecidos en la normativa de referencia, que hagan de los soportales un lugar seguro.

Además, se perseguirá lograr una solución de refuerzo estructural del forjado de los soportales, de manera que se alcance una sobrecarga de uso cercana a los 300 kg/m2; a la vez que se da solución a las filtraciones de agua en los locales inferiores a los soportales, dotando al forjado de una adecuada impermeabilización.

Gracias a este refuerzo estructural, se facilitarán las labores de limpieza y mantenimiento de los bajos, ya que permitirá introducir máquinas de limpieza adecuadas, que hoy en día no pueden acceder a los soportales.

La reurbanización de Erribera es uno de los proyectos estratégicos de esta legislatura, aunque se trata de una obra ya contemplada en los planes del mandato anterior.

Su tramitación ha sido larga y ha contado con un proceso participativo “amplio y con varias reuniones para consensuar el proyecto”. Varias de las propuestas vecinales fueron incluidas en el proyecto final.