Desde las instituciones públicas se lleva tiempo hablando de modernizar la movilidad en las ciudades, de hacerla más amistosa con peatones y ciclistas a costa de reducir el protagonismo de los vehículos motorizados. Se trata de un objetivo cada vez más presente en los planes urbanísticos de los ayuntamientos, y en Hondarribia se ha materializado este mes de agosto en sendas reconversiones de varias calles de la localidad en el marco del ambicioso proyecto de reurbanización Kalez Kale Hondarribia Hobetzen.

Las aceras de Errebellin han ganado anchura este mes.

Y es que aunque el verano es una de las épocas más concurridas del año en la localidad (y este año todo apunta a que se van a recuperar las cifras turísticas prepandémicas), el Consistorio ha decidido poner el pie en el acelerador de las reurbanizaciones que vienen a transformar Hondarribia. Eso sí, las calles en las que se ha actuado no son de las más transitadas por los visitantes, sino vías residenciales, como Errebellin o Donostia, o industriales, como en el caso del polígono Txiplao.

En concreto, las calles Donostia y Kosta son en las que más se han sentido los trabajos. En el caso de la primera, la vía ha sufrido afecciones a lo largo de todo el verano, comenzando desde junio, con las obras de fresado y asfaltado que afectaron a la primera parte de la calle. Actualmente, se están rematando los trabajos en el segundo tramo, el que va desde, aproximadamente, Madalen Gain hasta la rotonda de Sokoa. Ambas fases han supuesto la supresión temporal de plazas de aparcamiento, con la idea de recuperarlas al fin de los trabajos.

En Errebellin, las obras han buscado facilitar los tránsitos peatonales en el entorno escolar del centro Talaia Biteri, una de las líneas estratégicas del PMUS de Hondarribia, que dio comienzo con actuaciones en las calles Baserritar Etorbidea y Bitoriano Juaristi para dar servicio a otro de los centros de Talaia y al colegio Ama Guadalupekoa.

Como plan de acción integral para mejorar la movilidad urbana, Kalez Kale Hondarribia Hobetzen ya actuó en primavera en la calle Gibeleta, y la previsión es que el plan continúe con una actuación de calado en la zona de la calle Sabino Arana, en plena entrada al centro urbano. El inicio de esta última actuación está previsto para los meses de otoño, en torno a noviembre. Desde el Consistorio han anunciado también que habrá actuaciones en Bidasoa Ibilbidea y las calles Axular e Irun. El presupuesto total para el conjunto del proyecto supera los tres millones de euros.

movilidad actual

Por supuesto, la apuesta por la movilidad priorizando a peatones, ciclistas y al transporte público, en ese orden, no solo pasa por dotar de mejores infraestructuras y servicios a la ciudadanía, sino también por mantener las prestaciones actuales. En ese sentido, todos los grupos municipales del Ayuntamiento de Hondarribia han coincidido este verano en considerar que el anteproyecto de concesión del servicio público de autobuses que la Diputación Foral de Gipuzkoa presentó en junio supone una merma de los servicios con los que hasta ahora contaba la ciudad.

En ese sentido, el alcalde, Txomin Sagarzazu, y el concejal de Medio Ambiente, Juan Luis Silanes, se han reunido este mes de agosto con el director general de Movilidad y Transporte Público del ente foral, Ander Iturri, para presentarle las alegaciones que el Ayuntamiento de Hondarribia ha acordado realizar al anteproyecto. Las preocupaciones del Consistorio se refieren a las líneas E20, que une Hondarribia con Donostia, E21, que lo hace por la autopista, E22, que une Hondarribia con el Hospital Comarcal y el Centro Comercial Txingudi, y E25, que va al centro de Irun.

La reducción de frecuencias de algunas de estas líneas no han gustado ni en el seno del Ayuntamiento ni en el tejido social de la ciudad representado en la Mesa de Movilidad. Una de las principales claves en ese sentido ha sido la reivindicación de mantener el itinerario del autobús (E25) que cubre la zona de Donostia kalea o Sokoa, “puesto que en dicha zona vive un tercio de la población de Hondarribia, y donde también están situados dos centros escolares, a los que no se puede dejar sin servicio”, como argumenta el Consistorio en sus alegaciones.

Tras la reunión, el alcalde Sagarzazu quiso agradecer su disposición al director foral a la hora de atender las alegaciones del Ayuntamiento de Hondarribia. El primer edil consideró que en el encuentro se percibió “buena sintonía” por lo que espera que desde la Diputación se tengan en cuenta las peticiones de la ciudadanía hondarribiarra.