donostia - La obras que quedaron paralizadas en 2011 junto a Matia Fundazioa, donde se preveía construir un Instituto Gerontológico, volverán a estar en marcha a principios de 2020 para crear en el mismo lugar 54 de alojamientos específicos para personas mayores que necesitan asistencia y se vincularán con la investigación gerontológica.

La Junta de Gobierno del Ayuntamiento de Donostia dio ayer su aprobación a ampliar la concesión municipal del terreno a Matia Fundazioa, así como al cambio de licencia de obras, que permitirá construir un edificio con 51 apartamentos asistenciales de alquiler para personas mayores, con problemas de ictus, psicogeriátricos y enfermedades degenerativas y otros tres que servirán para probar las nuevas tecnologías que vayan surgiendo y productos de apoyo que minimicen la discapacidad.

En todos los alojamientos se podrán tomar datos de la vida diaria de sus residentes, que servirán para la investigación sobre el envejecimiento. Además, el complejo también incluirá un edificio para centro de día, con el fin de dar respuesta a las necesidades del barrio y de los inquilinos de las nuevas viviendas, y otro inmueble destinado a la investigación gerontológica. El conjunto tardará un año en convertirse en realidad, según el plazo de obras.

El alcalde, Eneko Goia, consideró ayer una “buena noticia” la reactivación de un proyecto destinado a las personas mayores. El mandatario explicó que, tras los problemas de falta de financiación que llevaron a la paralización del proyecto hace ocho años, la nueva iniciativa ha logrado tres millones de euros tras “la última negociación del grupo nacionalista vasco en Madrid”, lo que “permite que hoy en día tire para adelante”.

Matia Fundazioa, por su pate, explicó que el proyecto supondrá una inversión de 14,5 millones y que cuenta con una subvención nominativa del Ministerio de Sanidad, Consumo y Bienestar social a través del Imserso. Asimismo, recuerda que el proyecto se remonta al año 2009, aunque ha tenido que ser reformulado “para adaptarse a las actuales necesidades y tendencias en materia de envejecimiento que actualmente afloran con fuerza en Europa y por lo tanto en Gipuzkoa”.

El proyecto, según explicó la entidad asistencial, “pretende hacer realidad el paradigma vivir en casa o como en casa, difundido desde diversas administraciones europeas y otros organismos internacionales que invitan a desarrollar y evaluar experiencias de alojamientos para personas que necesitan ayuda”.

Los apartamentos que se construirán junto al centro Matia serán diferentes a los modelos residenciales clásicos “que no son ni elegidos ni deseados por sus potenciales usuarios”. El programa piloto que se probará en Donostia busca un modelo de vida doméstico, personalizado, que dé respuesta a las distintas personas que van envejeciendo, con sus distintas particularidades.