donostia - El espacio surgido bajo la nueva estación del Topo en el barrio de Loiola se encuentra estos días en plena transformación para convertirse en una zona de tránsito peatonal y ciclista. La obra ha sido encargada por Euskotren, aunque cuenta con financiación del Ayuntamiento, que aporta 1,1 millones de euros para esta renovación urbana ligada al moderno apeadero.
La urbanización de este entorno, que contará con bidegorri, bancos y zonas verdes, estará culminada el próximo otoño, según el calendario previsto, y supondrá el punto final de la transformación de un céntrico enclave del barrio de Loiola, que inauguró su nueva estación elevada el pasado mes de marzo. En total, los nuevos espacios transitables suman 10.000 metros cuadrados de uso público, que supondrán un paso similar al creado bajo las vías del tren junto a los juzgados de Atotxa.
El tramo próximo a Sierra de Aralar está prácticamente rematado, tanto es así que los organizadores de las Jornadas Micológicas de Loiola han atado como alternativa a la plaza de las Lavanderas el espacio situado bajo los tableros de las vías del tren para acoger la exposición y mercado de productos micológicos en el caso de que la lluvia no respete la convocatoria el 1 de octubre.
Por otra parte, el Ayuntamiento licitará próximamente la obra que permitirá la transformación de la travesía de Loiola, que conecta el Topo con los cuarteles, una intervención que podría incluir un aparcamiento.
Astiñene Cerca de esta zona se halla el puente de Astiñene, para el que tres empresas, a invitación del Ayuntamiento, van a presentar un proyecto que permita su apertura al tránsito del tráfico peatonal y ciclista. Según explicó el delegado de Vías Públicas, Miguel Ángel Díez, esta intervención no requiere de una convocatoria pública, ya que el importe de la obra no lo justifica. La intervención de “atiramiento de las bóvedas” que hará posible la recuperación para los viandantes del puente que une Loiola con Egia se desarrollará en octubre.
Díez explicó, por otra parte, que se está trabajando en el proyecto para abrir a la circulación de vehículos este centenario puente, que tiene los días contados ya que Costas del Estado ha dado luz verde a la construcción de la estructura que lo sustituirá a futuro.
Según recordó el delegado de Vías Públicas, tampoco cuando el puente se abra al tráfico rodado provisionalmente podrá asumir el paso de vehículos de gran tonelaje, que seguirán vías alternativas.