El Ayuntamiento de Urnieta y el club de fútbol de la localidad han emitido sendos comunicados en el que rechazan la actitud de parte del público que asistió al partido entre Urnieta KE y el Hondarribia correspondiente a la Regional Preferente Masculina, en el que también se encendieron varias bengalas

El Consistorio ha emitido un comunicado en el que “denuncia y reprueba de manera rotunda el comportamiento que un grupo de espectadores” tuvo durante el choque celebrado “en las instalaciones municipales de Urnieta”.

Según explica el Ayuntamiento, los hechos denunciados, con “un comportamiento de lo más reprobable en la grada”, implican también “la quema de bengalas con el riesgo que eso supone para el resto de espectadores, jugadores y asistentes en general”.

“No es la primera vez que hechos similares tienen lugar en nuestras instalaciones y el Ayuntamiento no está dispuesto a aceptar comportamientos de este tipo”, avisa la institución local, que “llevará a cabo las acciones necesarias para intentar que estos peligrosos hechos no se vuelvan a producir”.

Por último, el Gobierno local “apela a las conductas de respeto y civismo que faciliten la buena convivencia, y se espera que este tipo de sucesos no se vuelvan a dar”.

La sección de fútbol del club deportivo también ha emitido un comunicado este lunes en el que muestra su “total rechazo” con lo sucedido durante el partido. Según explica la entidad, “las personas que participaron en la acción de las bengalas no entienden los valores de nuestro club”, al tiempo que señala que “la inmensa mayoría del público asistente tuvo un comportamiento ejemplar que agradecemos”.

Por último, el club asegura que procurará que “estos lamentables hechos no se repitan en el futuro”.

Erradicar conductas

No es la primera vez que un partido de fútbol guipuzcoano es noticia por las faltas de respeto en los partidos de aficionados. A primeros de año, la presidenta de la Unión Deportiva Aretxabaleta, Agurtzane Elkoro, dio la voz de alarma ante la actitud de un grupo de jóvenes que seguían al equipo de categoría juvenil, tanto en Aretxabaleta como a domicilio.

“El problema no es del fútbol, está en la sociedad y hay que hacerle frente”, advirtió Elkoro en marzo a este periódico, que más allá de las sanciones que han acarreado al propio club atxabaltarra, quiso poner en el foco “el problema social que hay en el fondo y que debemos erradicar”, sobre todo tras la pandemia.

A su entender, “es como si estos jóvenes descargaran su odio, en este caso en espacios que concentran a mucha gente como es el fútbol, donde la repercusión es mayor”.