El primer rifi-rafe entre el nuevo gobierno municipal de Hondarribia, en manos de Abotsanitz y el PNV, no ha tardado en asomar. Este enfrentamiento se ha producido a cuenta de la sociedad Hondarribia Lantzen y su relación con la empresa Kirolzer SL, responsable de la explotación del Polideportivo Hondartza y del Frontón Jostaldi.

Según el nuevo ejecutivo local, una auditoría ha revelado que Hondarribia Lantzen abonó a la empresa Kirolzer 222.034 euros más de lo que le correspondía legalmente. Frente a esta acusación, el PNV en su nota asegura que el equilibrio económico de Hondarribia Lantzen en su relación con Kirolzer “se basó en sendos informes jurídicos y económicos externos e independientes”.

Según el PNV, aquella decisión fue consecuencia de un informe jurídico elaborado por Landaberea Abogados y por un informe económico-financiero elaborado por LKS Financial Solutions. “Ambos informes concluían que la compensación debía hacerse y que el importe económico a satisfacer ascendía a 978.223 euros”.

En su nota, la formación jeltzale recuerda “la complejidad del contexto” marcado por la pandemia. Los objetivos que se priorizaron por parte de Hondarribia Lantzen fueron los de garantizar el servicio a la ciudadanía, mantener la actividad del polideportivo y el frontón, así como sostener los empleos asociados a dicha actividad. Evitamos el cierre y los despidos”.

El PNV prosigue explicando que fue su gobierno quien puso en marcha la auditoría de las cuentas de Hondarribia Lantzen, cuyas conclusiones ha dilvugado Abotsanitz. “Esta auditoría sirve precisamente para actualizar el equilibrio financiero entre la sociedad pública y Kirolzer, que ahora deberá restablecer. El ayuntamiento tiene sobre la mesa actualizar la compensación a Kirolzer atendiendo a las conclusiones de todos los informes que están a su alcance”.

En este sentido, pregunta al nuevo equipo de gobierno “cuándo va a iniciar el trámite de sacar a concurso la gestión del polideportivo”, que es lo que “recomienda activar la auditoría y lo que el gobierno del PNV dejó preparado” antes de las elecciones municipales.

 Por todo ello, el PNV acusa a Abotsanitz de seguir manteniendo en el gobierno “el mismo estilo” que caracterizó su labor de oposición, “al ocultar información relevante e informar de manera parcial con el único objetivo de generar desconfianza”. Asegura que mantiene los “cien días de gracia” hacia el gobierno municipal de Abotsanitz, pero advierte de que “existen líneas rojas que son infranqueables, por lo que no vamos admitir ninguna tergiversación intencionada”. 

El PNV emplaza a Abotsanitz a “tomar decisiones y a empezar a gestionar los problemas que se le acumulan en la ciudad. Los errores que ya asoman en el nuevo gobierno no pueden taparse señalando a los demás y centrifugando responsabilidades. Gobernar requiere tomar decisiones y asumir consecuencias. Las decisiones compartidas pueden resultar muy enriquecedoras, siempre y cuando no sean para evitar tener que asumir responsabilidades”. – N.G.