Donostia - El intercambiador de Riberas de Loiola está un paso más cerca de ser una realidad. El Departamento de Transportes del Gobierno Vasco sacó ayer a exposición pública la construcción de esta nueva infraestructura que permitirá realizar transbordos entre las líneas de Euskotren y de Renfe en un mismo espacio. El proyecto prevé un coste de 39,4 millones de euros y un plazo de ejecución de 36 meses.

El paseo de Zorroaga, a la altura del Jardín de la Memoria y en un punto intermedio entre los barrios de Amara Berri y Riberas de Loiola, es el punto escogido por Euskal Trenbide Sarea (ETS) para la construcción de una nueva estación que dé servicio tanto a la línea del Topo como a la de Cercanías de Renfe. De este modo, los usuarios de ambas compañías podrán realizar transbordos en un mismo lugar.

Así lo especificó ayer el departamento de Planificación Territorial, Vivienda y Transportes del Gobierno Vasco a través de los detalles de un proyecto cuya ejecución tendrá un coste inicial de 39,4 millones de euros (IVA incluido) y un plazo de obra de tres años.

En la actualidad, a pesar de que el Topo cruza la línea de Renfe, no existe ningún tipo de apeadero que permita la movilidad de los usuarios entre ambas compañías. Un nuevo edificio con dos andenes laterales obligará a desplazar las actuales vías de Euskotren permitiendo la construcción del intercambiador.

Esta importante intervención contempla la cobertura del 50% de las vías de Adif a lo largo de sus nuevos andenes con el objetivo de dotar de luz y ventilación a la nueva estación. Asimismo, en una segunda fase del proyecto se construirá un acceso directo al intercambiador desde la Avenida de Barcelona.

Según se detalla en la información, las instalaciones y los andenes de Euskotren permanecerán sobre la superficie, mientras que los correspondientes a Adif estarán soterrados. Este soterramiento posibilitará la ampliación del Jardín de la Memoria hasta su conexión con el Parque de Amaiur, generando una zona verde mayor.

Ambas estaciones deberán disponer de sus correspondientes corredores, distribuidores y escaleras de comunicación.

Para el consejero de Transportes del Gobierno Vasco, Iñaki Arriola, este proyecto supondrá "un importante impulso al transporte ferroviario de Gipuzkoa al conectar dos ejes principales del transporte por tren del territorio".

El plazo para presentar alegaciones ya está abierto y se prolongará por 30 días hábiles, en los que se podrán formular cuantas argumentaciones se estimen. Asimismo, el estudio informativo del proyecto estará a disposición del público para su examen.