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El Portaviones acogerá un “espacio gastronómico”

Comienzan las obras para habilitar la zona central, que estará listo en la próxima primavera

El Portaviones acogerá un “espacio gastronómico”Esti Veintemillas

Donostia - El Portaviones del muelle donostiarra, cuya reforma finalizó el pasado mes de febrero, inició ayer las obras para transformar el espacio interior de 390 metros cuadrados, que prevé su apertura en el primer cuatrimestre de 2020. El local contará con un “espacio gastronómico de degustación donde se servirán elaboraciones que pongan en valor los productos” de la pesca de bajura que pretende promocionar el lugar, así como una tienda de conservas y una sala multiusos en la que tendrán lugar distintas actividades.

El nuevo espacio ha sido bautizado como Kofradia-Itsas Etxea y tiene como objetivo dar a conocer la pesca de bajura. La Organización de Productores de Pesca de Bajura de Gipuzkoa, Opegui, es la promotora del proyecto y la que gestionará la totalidad de la actividades que se desarrollen en el lugar.

Así, según explicó por medio de una nota informativa, Kofradia-Itsas Etxea contará con “una oferta singular en el territorio aunando actividades, cocina y productos de temporada destinados no solo a aprender a degustar una de las joyas gastronómicas de nuestro entorno, sino también a valorar una actividad milenaria que sigue siendo fiel a un trabajo artesanal”.

Se prevé que el espacio multiusos acoja también un programa de talleres y experiencias para divulgar la cadena de valor de la pesca, las temporadas de cada especie, la transformación de pescado y el conocimiento sobre las artes de pesca de la costa vasca.

cadena de valor “Nuestro objetivo es dar a conocer la pesca de bajura, acercando su día a día a la ciudadanía y para ello queremos mostrar todas las piezas que son parte de esa cadena de valor, desde el propio pescado y sus temporadas, hasta los armadores, los pescadores, las rederas, la función de las cuotas de pescado...”, explicó la directora de Opegui, Miren Garmendia. “Es un lugar donde los arrantzales podrán volver a abrir su casa, su cofradía”, añadió.

La reforma del edificio de la antigua lonja, conocido como Portaviones, se ejecutó en un periodo de nueve meses, cuatro más de los inicialmente previstos, ya que fue necesario reformar la estructura del pabellón, que data de 1943.

La reforma de la construcción pesquera costó 1,5 millones de euros y transformó tanto el exterior, con cerámica blanca, como el interior del edificio. Además de la zona central, que acogerá las instalaciones relacionadas con la pesca de bajura, el pabellón, tiene cuatro sotos para arrantzales y servicios para navegantes en tránsito, como lavandería y duchas.