Donostia. El Gobierno municipal planteará esta semana a los grupos de la oposición que la tasa correspondiente a la recogida de basuras sea variable. El objetivo es que pague más quien más residuos genere y, para eso, se fijarán en el consumo de agua de cada hogar: si se consume abundante agua, se deduce que en esa vivienda hay mucha gente y, en consecuencia, generarán más basura que en un piso en el que habite una sola persona.
La propuesta concreta de Bildu es que se establezca una tarifa fija que supondrá el 65% de la factura y que el 35% restante sea el que varíe en función del agua consumida. Con esta tarificación, el Ejecutivo municipal calcula que la mitad de los donostiarras pagarán menos por la recogida de basuras, un 20% pagará lo mismo que ahora y un 30% pagará algo más.
El delegado de Hacienda, Jabi Vitoria, explicó el martes que el objetivo del Gobierno no es recaudatorio ya que la cantidad total ingresada será la misma que en 2012, después de aplicar el incremento correspondiente al IPC.
Y es que el criterio general de Bildu en su propuesta para el resto de tasas e impuestos municipales será, precisamente, aumentarlas en proporción al IPC, al tiempo que plantea crear nuevas bonificaciones en los pagos al Consistorio para las familias con problemas económicos.
Bildu aboga también por seguir el mismo criterio en la tasa de basura que pagan las actividades económicas, es decir, que la factura se adecue también a los residuos que generan una empresa y otra, aunque de momento no será posible ejecutar ese cambio para 2013.
viviendas vacías Vitoria adelantó también otra de las propuestas fiscales que presentarán a los grupos de la oposición estos días: encarecerán el IBI (Impuesto de Bienes Inmuebles) a las viviendas vacías.
Según explicó el responsable de Hacienda, el objetivo de esta medida es poner en circulación las viviendas vacías que existen en la ciudad. Vitoria concretó que en estos momentos hay casi 13.000 viviendas en las que no hay ninguna persona empadronada, aunque no todas ellas están vacías (pueden estar alquiladas para periodos cortos o utilizarse como estudios u oficinas, entre otros). La norma foral permite gravar el IBI de las viviendas vacías hasta un 150%, aunque el responsable de Hacienda adelantó que Bildu no plantea ir tan lejos y que concretarán una cifra según los acuerdos a los que lleguen con los grupos de la oposición.
Respecto al resto de tasas e impuestos, Vitoria explicó anteriormente que su intención es congelar la viñeta de la OTA y lograr que en caso de desahucio no sea el desahuciado quien se haga cargo de la plusvalía, sino que esta sea asumida por la entidad bancaria o por la persona que se quede con la vivienda en cuestión. También anunció subvenciones en el Impuesto de Actividades Económicas (IAE) para las empresas que creen empleo.
Para sacar adelante la actualización de las tasas e impuestos municipales y que estos puedan estar aprobados y empezar a aplicarse en enero, el Gobierno municipal necesita contar con el apoyo de al menos uno de los tres grupos de la oposición. El pasado año lo encontró en el PSE-EE.