A veces parece que los famosos están a salvo de todo, sin embargo, incluso en lugares donde se supone que hay una fuerte seguridad, como es el caso de los conciertos, también pueden ocurrir incidentes, como le pasó a Dani Martín durante uno de sus últimos conciertos, cuando una de sus guitarras desapareció minutos antes de subirse al escenario. 

DANI MARTIN SUFRE EL ROBO DE UNA GUITARRA MUY IMPORTANTE PARA ÉL 

Minutos antes de dar comienzo a su concierto en la plaza de toros de Murcia, Dani Martín sufrió un robo que quiso denunciar en el mismo escenario. 

El cantante paró unos segundos su show para denunciar el robo de uno de sus instrumentos, una guitarra que tiene un gran valor sentimental para él, puesto que fue la que utilizó para componer algunos de sus grandes éxitos. 

Martín explicó al público presente que el robo tuvo lugar en torno a las 21:30 horas, momento en el que él se estaba preparando para ofrecer el concierto y se vio obligado a salir un momento de su camerino. 

Al regresar se dio cuenta de la ausencia del instrumento y no quiso dejar pasar el incidente, por lo que aprovechó la oportunidad de enviarle unas palabras al ladrón desde el escenario. 

Visiblemente molesto, el artista aseguró que el autor del robo "tendrá tanta putrefacción dentro que lo que necesita será un abrazo enorme", y añadió con ironía que "esperaba que la vendiese y usara el dinero para comer". 

Los fans presentes en el concierto no pudieron disimular su asombro ante las palabras del cantante y se quedaron sin palabras, sin embargo, Dani Martín supo tirar de sentido del humor y pidió un aplauso para  "ese amigo de lo ajeno", y dejó claro que "nadie le iba a robar la alegría ni las ganas de hacer el concierto y menos por algo material", una declaración de intenciones ante la que los presentes respondieron con aplausos y vítores al artista.  

Este martes, Dani Martín decidía compartir un tweet y un post en Instagram en el que explicaba lo ocurrido para aquellos que no se hubieran enterado de lo sucedido el pasado fin de semana, y compartía el modelo y número de serie de la guitarra avisando que si alguien se la encuentra por casualidad en alguna tienda de segunda mano sepa que el robo está denunciado ante la policía.