La gilda es uno de los pintxos más icónicos y representativos de la gastronomía de Donostia.
Este bocado, sencillo pero lleno de sabor, tiene una historia fascinante que lo vincula tanto a la tradición gastronómica vasca como a la cultura popular del cine.
Nacida en los bares de la ciudad a mediados del siglo XX, la gilda es un ejemplo perfecto de cómo los pintxos, esas pequeñas pero exquisitas raciones servidas sobre una rebanada de pan, pueden transmitir el alma y la identidad de una región.
La receta original de la gilda consta de tres ingredientes principales: aceitunas verdes, una guindilla en vinagre y un filete de anchoa en aceite. Todo ello se ensarta en un palillo, logrando una mezcla perfecta de sabores: la salinidad de la anchoa, el toque picante de la guindilla y el frescor de la aceituna.
A pesar de su aparente sencillez, la gilda es un pintxo que sorprende a quien lo prueba por primera vez debido a la explosión de sabor que genera en el paladar.
El nombre de este pintxo tiene una historia curiosa. Se le llamó "gilda" en honor al famoso personaje interpretado por Rita Hayworth en la película del mismo nombre, estrenada en 1946. La razón de esta peculiar asociación es que, al igual que la protagonista del filme, la gilda es "salada, verde y un poco picante". Esta descripción encajaba a la perfección con las características del pintxo y pronto se convirtió en un nombre popular en los bares de la ciudad.
La mejor gilda de Donostia
A lo largo de los años, la gilda ha mantenido su lugar como uno de los pintxos más queridos en Donostia, y uno de los locales que mejor la prepara es Antonio Bar, ubicado en la calle Bergara 3.
Este establecimiento ha logrado destacarse en un panorama gastronómico repleto de excelencia, obteniendo un Solete de la prestigiosa Guía Repsol, un reconocimiento otorgado a locales que ofrecen una experiencia única y cercana.
Además, Antonio Bar ha sido incluido en la lista de los mejores pintxos de Euskadi, una distinción que lo sitúa entre los grandes referentes de la cocina vasca, un logro aún más significativo cuando se considera que esta lista es elaborada por algunos de los chefs más reconocidos con estrellas Michelin.
El pintxo favorito de reconocidos chefs
Entre los amantes de la gilda y de la buena gastronomía, Antonio Bar es un lugar de peregrinaje. Reconocidos chefs como Martín Berasategui, Elena Arzak y Paco Roncero han expresado su aprecio por este local, elogiando la calidad de sus pintxos y, en particular, su interpretación de la gilda.
Esto es un testimonio del respeto que genera entre los expertos del sector, que valoran tanto la tradición como la excelencia en la ejecución de los platos más simples.
Visitar Antonio Bar en Donostia es una experiencia imprescindible para cualquier amante de los pintxos.
La gilda que allí se sirve es la encarnación perfecta de la cocina vasca: auténtica, cargada de sabor y respetuosa con la tradición.
Aunque la ciudad está llena de lugares que ofrecen este pintxo, pocos logran captar la esencia de la gilda de la misma manera que este emblemático bar.