Un total de 22 bares de seis localidades de Gipuzkoa han sido distinguidos con los Soletes de la Guía Repsol, que se han dado a conocer esta semana en Santander en sus distintas categorías: bares, restaurantes, cafeterías y heladerías, entre otras.
Donostia es la localidad que mayor número de establecimientos distinguidos registra, con un total de 14.
En la Calle Mayor se encuentra Paco Bueno, un bar que reúne, tal y como destaca la guía, “todos los clásicos donostiarras exquisitamente cocinados”. Destacan sus pintxos de huevo, sus gildas, pero por encima de todos, sus reconocidas gambas a la gabardina, la auténtica especialidad de la casa.
También en la Parte Vieja (calle San Vicente, 9), en el local que albergaba la ya desaparecida Colchonería San Vicente, Bells bar destaca por sus pintxos, medias y raciones, entre las que sobresale la tortilla, que se cocina únicamente a mediodía.
En la calle Pescadería, 5 encontramos en bar Txepetxa, uno de esos locales que todavía mantienen la esencia de la Parte Vieja donostiarra. Sus anchoas marinadas hacen las delicias de los clientes en cualquiera de sus versiones: con crema de centollo, mermelada de arándanos, foie y compota de manzana, con paté de oliva o papaya… Merece la pena probar todas ellas.
¿Te gusta el rabo con tuétano, el arroz trufado con foie o el tomate asado? Tu sitio es el Mendaur (Fermín Calbetón, 8), un bar con una barra de pintxos “fresca y divertida” cuya cocina no cierra.
La Viña (31 de agosto) es mucho más que su famosa tarta de queso, cuya receta se replica en los cinco continentes. En su carta destacan pintxos y raciones de la tradicional cocina vasca, basados en materias primas de primerísima calidad.
En la misma calle, Ssua Arde es un local que destaca por su “personalidad propia” y su “gran cultura gastronómica”. Ofrece una propuesta culinaria diferente al resto de establecimientos de la zona. Black Txipis, Vieira Parilla o Txiken Pops, son algunas de las recomendaciones de la guía.
Otro de los bares tradicionales de pintxos reconocido por la guía es el Haizea (calle Aldamar, 8), un local donde disfrutar, entre otros, de la “brocheta de vieira, el foie con manzana o el buñuelo de bacalao”.
En pleno centro de Donostia, los cócteles, tapas y raciones del Xiri (calle Idiakez, 10) han llamado la atención de la guía, que recomienda pedir carrilleras o la ensalada de burrata con tomates del entorno.
Maun Grill Bar es el “espacio gastro” del Mercado de San Martín. “Tiene algunas mesas y una divertida barra donde comes viendo el ritmo de los fuegos y la parrilla”, apunta la guía Repsol, que destaca su “buen producto”.
La Espiga es uno de los bares con parada obligada de la calle San Marcial. “Los grandes cocineros suelen dejarse ver por aquí para ponerse morados de pimientos rellenos, anchoas, gulas estrelladas y pintxos de txuleta”, dice Repsol.
En la calle Bergara, 3 espera la popular tortilla de patata del bar Antonio, que cuenta también con una amplia carta de pintxos “con filosofía de frescura y elaboraciones al momento”.
En el barrio de Gros tenemos en bar Bergara (Calle General Artetxe, 8), un establecimiento con medio siglo de tradición, con una amplia carta de pintxos tradicionales y de vanguardia entre los que destaca, según Repsol, el txalupa: hojaldre de stas, langostino, nata y cava.
En Amara, en la calle Jose Maria Salaverria nos encontramos el Arrate, una “tasca ideal para el aperitivo”, que sirve encurtidos, embutidos, conservas o sencillas tostas.
Los amantes de la cocina oriental tienen una visita obligada a Yaku Nikkei (calle Juan de Garai), una “barra de sushi con decenas de variedades, del nigiri al futomaki, con buen producto y ejecución”. Ofrece también tartares, ceviches, tiraditos así como platos calientes de costura nikkei, destaca Repsol.
Zumaia, tres distinciones
“Desde la llegada de Imanol López, Igor Arregi y Alberto Ituarte puedes comer platos viajeros, como el taco de camarón”. Hablamos del Idoia (Julio Beobide, 2), un establecimiento con cuatro décadas de historia que, además, dispone de una magnífica terraza frente al río Urola.
En Eusebio Gurrutxaga, 8, el bar Kraken ofrece una amplia carta de picoteo en el que destacan sus huevos estrellados y sus hamburguesas. Es además un sitio excelente para disfrutar del aperitivo o de unas copas nocturas, y además, es un local dogfriendly.
En Ardantzabidea, 16, Atari taberna ofrece en pleno centro de la localidad costera pintxos, raciones y un menú tradicional que hacen las delicias de los clientes. La spa de pulpo y las croquetas son los imprescindibles para Repsol.
Irun, Hondarribia, Lazkao y Ordizia
Irun cuenta con dos establecimientos reconocidos: Danako (Alzukaitz Kalea, 1 ) y Real Unión (Cipriano Larrañaga, 1). El primero cuenta con unos pintxos “excelentes”, además de menú del día y menú de fin de semana, mientras que Repsol destaca del segundo que “la calidad de los 'pintxos' rivaliza con la del buen rollo”.
En la vecina Hondarribia, la guía destaca Enbata (Zuloaga kalea, 5), donde se puede disfrutar de sus pintxos de atún rojo, sus sushis de verduras o las ensaladillas de langostino. Pero si hay una estrella en la barra, ese es el cangrejo entero en tempura.
La Guía Repsol llega hasta el barrio Lazkaomendi de Lazkao, una “zona de excursionistas” donde el bar Pipas ofrece “cocina casera sencilla, bocadillos y platos combinados a buen precio”
Finalmente, en Ordizia, la guía recoge el cambio de manos que ha vivido el Olano (Foruen Pasealekua, 1), que ha dotado al bar de un “nuevo impulso, más joven y actual”. Destaca su “buena barra con raciones, comidas y cenas bajo reserva”, así como su filosofía de abastecimiento local.
