Eliminar mitos del menú

Muchas personas creen que si se saltan alguna comida perderán peso. Bajo esta premisa, subyacen otras cuestiones, como si es necesario comer cinco veces al día o el ayuno intermitente. Respecto a la primera idea, la doctora es tajante: "Absolutamente no. No hay que comer cinco veces al día, excepto en caso de necesidad o alguna patología. Pero la persona sana no debería comer tantas veces, porque cada vez que comemos hay una elevación de los picos de insulina -que es la hormona que hace que el azúcar baje- y lo que genera son subidas y bajadas de insulina que no son fisiológicas. La insulina tiene que tener unos picos, pero no tantos a lo largo del día porque eso a las personas susceptibles les puede generar una diabetes a largo tiempo, por ejemplo", señala Tellería.

Pero, además, aporta otro argumento: "Por otro lado, hay un movimiento a nivel intestinal que se genera a partir de las tres horas de ayuno y eso lo que va a hacer es arrastrar restos de comida y detritus; es decir, se genera una limpieza. Si no dejamos limpiar al intestino porque estamos comiendo constantemente, al final va a haber una acumulación de todo eso. Muchos dirían: Eso ya pasa por la noche. Pero es mejor que lo hagas a lo largo del día", añade la especialista. Y en este contexto, sale el asunto del ayuno intermitente, algo que puede resultar positivo y que, realmente, "hacemos al dormir ocho horas y sumarle las dos anteriores, porque no has cenado y te has ido a dormir seguido, y si ya tardas un poco en desayunar... llegas a las doce horas de ayuno", comenta la doctora.

Si se toma una cena excesiva, es conveniente dejar pasar tres o cuatro horas antes de acostarse

Hablando de cena... ¿Mejor no comer pasta por la noche? Tellería no se refiere únicamente a la pasta e indica que si se realiza una cena excesiva, "hay que dejar pasar tres o cuatro horas antes de ir a dormir", tal y como puntualiza. "La pasta, personalmente, es un alimento que no me entusiasma. Su ingesta va a depender de si necesitas perder peso, de la actividad física, de lo que vayas a hacer después de cenar. No podemos decir pasta no o pasta sí", apunta.

Productos "light"

No es muy defensora de la pasta, pero mucho menos lo es de los productos light. "Yo soy anti-light", sostiene. Y, por ejemplo, se centra en los lácteos con estas características. "Ya se han hecho muchos estudios que demuestran que las personas que toman lácteos enteros tienen menos problemas de sobrepeso y obesidad. Porque al final crees que estás tomando un producto bajo en grasa, pero te tomas el doble porque no te sacia. O te tomas uno que es light y dices: Ahora me como dos galletas. Es que los yogures light son muy poco saciantes. A mis pacientes les digo que tienen que tomar yogur de oveja o de cabra, que aún son más potentes, y me contestan: ¿Qué me dices, y entero? Y la sensación es que están comiendo algo decente, porque lo otro es indecente, es completamente artificial y no tiene nada que ver con lo que hay en la naturaleza", describe Tellería.

En cambio, sí se muestra partidaria de los huevos. "El huevo sí que es un superalimento. Es una proteína de mucha calidad. Tiene más colesterol que otro alimento. Pero curiosamente, la gente que tiene el colesterol alto, en un 70% es colesterol endógeno, es decir, el que generamos nosotros, no el que viene en la dieta. El que generamos viene más por grasas trans, hidrogenadas, por alimentos ultraprocesados, etc. No tanto por el colesterol que puedan tener los alimentos", explica Tellería. "El huevo, nutricionalmente es muy rico en proteína, en hierro, en zinc, en vitaminas del grupo B... encima como alimento proteico es más barato", concluye.

Más tópicos sobre la alimentación

• Pan, ¿amigo o enemigo? Para la nutricionista Ana Tellería, "el pan industrial es un alimento absolutamente prescindible". Más si cabe, porque hoy en día "es un alimento que está muy alterado. La mayoría son panes industriales, por lo que el valor nutricional que pueda tener el pan de hoy en día es bastante pobre y tiene un poder adictivo bastante grande", comenta.
• La fruta ¿mejor antes de la comida? En los últimos tiempos se ha extendido el rumor de que es mejor comer la fruta antes de la comida, en lugar de después, como postre. "Nuestro sistema digestivo está preparado para que la fruta se coma cuando se quiera. Todo acaba mezclándose en el estómago y no hay ningún problema", indica Tellería.
• "¡Tómate el zumo que se le van las vitaminas!". Hay que intentar comer la fruta entera porque al tomarla en zumo, eliminamos la fibra", advierte la doctora. En el caso en que este alimento se ingiera en forma de zumos, "no pasa nada por tomarlo cuando ha pasado un tiempo después de exprimirlo, porque las vitaminas se mantienen; lo que puede cambiar es el sabor, sobre todo si no se guarda en frío", puntualiza la nutricionista. Por lo tanto, esa vitamina C tan característica del zumo no se pierde.