El partido que disputaron el París Saint-Germain y el Lyon en el estadio Parque de los Príncipes este domingo se detuvo durante cinco minutos en la segunda parte por los cánticos insultantes procedentes de un sector de la grada local.
Exactamente en el minuto 51, el árbitro, Benoît Bastien, tomó la decisión de parar el encuentro cuando marchaba 2-1 a favor del París Saint-Germain hasta que los cánticos no cesaran.
El diario L'Equipe reflejó en su página web que uno de los cánticos fue "les lyonnais sont des salopes" ("los lioneses son unas zorras").
Inmediatamente, tres jugadores del conjunto parisino, Achraf Hakimi, Gianluigi Donnarumma y Vitinha, acudieron al sector de la grada implicada, la zona de los ultras de su club, para pedir que cesaran los cánticos e insultos.
Además, en los videomarcadores del estadio se reflejó un mensaje que indicaba a los asistentes al Parque de los Príncipes que el juego estaba detenido a causa de los insultos de un sector de los aficionados: "Respeto. Los cánticos insultantes están prohibidos. El partido podría detenerse o incluso perderse para el club".
Después de cinco minutos de parón, se reanudó el choque, que finalizó 3-1 a favor del PSG. A lo largo del resto del encuentro se pudo escuchar otro cántico desde el sector de los radicales del cuadro parisino: "Libertad para los ultras".
La dirección del Lyon abandona
Tras una pausa, los cánticos ofensivos continuaron lo que provocó que director general, director técnico y coordinador deportivo del Olympique de Lyon, Laurent Prud'homme, Matthieu Louis-Jean y Daniel Congré, respectivamente, abandonaran el palco del Parque de los Príncipes cinco minutos antes del final del partido.
No es la primera vez que la CUP (Collectif Ultras Paris) están en el centro de la polémica, ya que durante el partido contra Estrasburgo (19 de octubre), fue censurada por cánticos homofóbicos contra los marselleses, pocos días antes de que el PSG visitara Marsella en el Clásico del fútbol galo. Ya sancionado esta temporada, el PSG vio la tribuna de Auteuil parcialmente clausurada en el partido ante el Toulouse el 22 de noviembre.
Los hechos suceden durante unas semanas en las que Francia debate sobre los efectos de la eficacia de la ley francesa para hacer frente a este fenómeno social, con insultos homófobos y racistas.
“La petición que se ha hecho a la Liga de Fútbol Profesional (LFP) y a la Federación Francesa de Fútbol (FFF) en general es que se aplique estrictamente: suspensión, interrupción del partido y paralización”, precisó en octubre de 2024 el ministro de Deportes, Gil Avérous.
Entre las medidas que recoge la normativa de la Liga, existe la opción de dar por perdido el partido al equipo cuya afición incurra y se reitere en cánticos ofensivos.