Donostia – La Roma, que eliminó a la Real Sociedad en octavos de final, se clasificó ayer para disputar la final de la Europa League, gracias a su empate sin goles en casa del Bayer Leverkusen y hacer buena así su ventaja del 1-0 del partido de ida, en un ejercicio de contención ante las constantes embestidas sin premio del equipo alemán.

El BayArena vivió el segundo duelo en ocho días entre el extxuri-urdin Xabi Alonso y José Mourinho, alumno y maestro, como jefes de banquillo en dos equipos con trayectorias similares este curso. Ambos luchan en sus ligas por ocupar posiciones que den acceso a competición europea.

El cuadro de Leverkusen salió a por todas en ataque para remontar el gol de renta que lucía su rival. Incluso estrelló un balón en el travesaño de la portería romana, al cuarto de hora, por obra de Moussa Diaby tras una internada en el área y que culminó con un potente derechazo.

Más de una veintena de disparos realizó el Bayer Leverkusen, todos infructuosos, mientras que el equipo visitante solamente tiró una vez y ni siquiera fue a puerta. De tal modo, a la conclusión del partido, la frustración de Xabi Alonso en el banquillo alemán contrastó con la alegría de un José Mourinho que lleva a la Roma hacia nuevos hitos.

Roma-Sevilla, en la final

El Sevilla será el rival de la Roma en la final. El conjunto dirigido por José Luis Mendilibar se impuso a la Juventus en la prórroga (2-1) y disputará su séptima final en esta competición.

Andaluces e italianos empataron en la ida, en Turín, tras un tanto in extremis de los bianconeri (1-1). En Sevilla, Vlahovic adelantó a los visitantes a los 65 minutos de juego; Suso igualó para el Sevilla en el 71; y, ya en la prórroga, Lamela, de cabeza, marcó el gol decisivo.

David Moyes, a la final

El West Ham que dirige el extécnico de la Real David Moyes y la Fiorentina disputarán la final de la Conference League. El equipo inglés se impuso ayer al AZ Alkmaar por 0-1 (1-3, el resultado global); y el conjunto italiano ganó, tras marcar en el último instante de la prórroga, al Basilea por 1-3 (3-4). – N.G.