Las obras de ampliación de la tribuna este de Ipurua empezarán en mayo
Eibar. Las obras de ampliación de la tribuna este del campo de fútbol de Ipurua, donde juega el Eibar, empezarán en mayo y se prolongarán hasta 2017.
El club guipuzcoano ha presentado hoy la segunda fase de la reforma del estadio eibarrés. La primera consistió en el derribo y posterior construcción de una nueva grada norte más amplia y moderna.
Ahora se va a hacer lo mismo con la tribuna este, situada detrás de una portería, donde se sitúa la peña Eskozia La Brava. Tras disputarse en mayo el partido contra el Betis, en la penúltima jornada liguera, se tirará abajo la actual construcción para levantar otra con más capacidad.
Así, se pasará de las actuales 1.022 plazas de la grada este a 2.100 asientos en la nueva edificación, en 18 filas. Se aprovecharán las esquinas junto a las tribunas norte y sur para poner asientos donde ahora no existen. Ello supondrá un incremento de unas 1.100 nuevas localidades.
La futura construcción dispondrá de cuatro vomitorios para entrar y salir, con lo que se agilizaría la evacuación en caso de emergencia, comparado con los dos accesos actuales. Además, se eliminarán los pilares que ahora dificultan la visión del césped en los partidos a los espectadores. Se habilitará una zona para personas de movilidad reducida, que podrán acceder a ella mediante un ascensor, lo que no existe actualmente.
La nueva tribuna podrá ser ocupada por espectadores a partir de enero de 2017, pero no estará finalizada con todo su equipamiento hasta la Semana Santa de 2017.
Las obras reducirán durante medio año el aforo total de Ipurua en un millar de personas. De los 6.300 asientos actuales, al no poder emplear las 1.022 localidades de la tribuna este, que será derribada para construir la nueva, se pasará provisionalmente a unas 5.300 plazas. El estadio podrá acoger a unos 7.400 espectadores a partir de enero de 2017.
Los socios que ven los partidos en la grada este deberán reubicarse provisionalmente en las otras tres gradas del estadio. Esta situación provocará un perjuicio a los nuevos abonados que se dieron de alta en octubre de 2015, a partir de la temporada 2015-2016, ya que no podrán renovar su carné provisional.
Los afectados ya fueron avisados de esta circunstancia, pero podrán seguir como socios a partir de que se pueda ocupar la nueva edificación, en enero de 2017.
Los socios más antiguos y fieles, los que ya lo eran cuando los eibarreses militaban en Segunda B o en Segunda División, son los que tienen preferencia respecto a quienes se han dado de alta desde que el Eibar juega en Primera División.
Además de aumentar el aforo, la construcción de la nueva grada este permitirá dotarla de otros equipamientos en la zona baja, como una tienda oficial y un museo. También se construirá un aparcamiento subterráneo de 58 plazas debajo de la grada este.
Este proyecto de remodelación de la grada este tendrá un presupuesto de unos 3 millones (3.200.000 euros), sin contar impuestos. No hay ayuda institucional, por lo que en principio el Eibar deberá asumir todos los gastos, como también hizo con la reforma de la tribuna norte, que se estrenó en agosto de 2015 después de 9 meses de obras.