donostia - El Real Unión celebra esta temporada cien años de vida. El pasado sábado se cumplió exactamente un siglo desde que el Sporting y el Racing de Irun acordaron su fusión para dar a luz a la entidad actual. El nuevo Real Unión Club cerró un cisma entre los aficionados irundarras y se ha convertido en el conjunto más longevo y glorioso de la localidad del Bidasoa.
El Unión heredó una tradición futbolística que ya había traído varios éxitos a la comarca. El primer equipo fundado en la ciudad bidasotarra fue el Irún Football Club, creado en 1902. Cinco años más tarde este mismo equipo pasó a denominarse Irún Sporting Club, y en 1908 una escisión de esta entidad derivó en la creación del Racing Club.
Los dos conjuntos acumularon varios éxitos durante su breve existencia. En 1912, el Sporting se convirtió en el primer equipo irundarra que participó en la Copa del Rey, cayendo en las semifinales ante la Gimnástica Española. Un año más tarde fue el Racing quien participó en este torneo, el único que existía entonces de ámbito estatal. Los racinguistas no solo superaron las semifinales, sino que ganaron la final frente al Athletic de Bilbao y trajeron el primer título copero a Irun.
La final de 1914 se disputó en el histórico campo irundarra de Costorbe, pero ningún equipo de la localidad llegó a participar en la Copa, y tampoco en 1915.
rivalidad La rivalidad entre Racing y Sporting levantaba pasiones en Irun. La ciudad, que entonces apenas tenía 10.000 habitantes, estaba dividida entre los dos equipos. Incluso llegó a haber incidentes entre ambas aficiones. Las dos hinchadas, sin embargo, se unieron para celebrar el éxito del Racing en 1913, y el rey Alfonso XIII se atrevió a sugerir entonces la fusión de ambos clubes.
Finalmente, tras varias polémicas, los dos clubes crearon sendas comisiones para estudiar la fusión. El periódico El Correo del Norte relataba así el proceso: “Desde hace ya mucho tiempo, las discordias, discusiones y peleas que ocasionaba el apasionamiento por cuestión de partidismo no agradaban a los iruneses que, despojados de toda pasión, miraban fríamente los lamentables efectos de ese partidismo ciego. Surgió la idea de la unión firme y duradera. Los partidarios de la misma eran cada vez los más numerosos. La idea iba tomando cuerpo. Llegó determinado día y las directivas del Racing y del Sporting se mostraron preocupadas por los rumores que circulaban y por el ambiente marcadamente unionista que se notaba”.
Finalmente, “el Racing acordó por unanimidad la unión”. El Sporting, por su parte, necesitó dos asambleas para aprobar la fusión tras una primera reunión en la que “algunos alborotadores se opusieron con sus protestas”.
Los dos clubes designaron sendas comisiones para ultimar la fusión. Finalmente, el 9 de mayo, “ante numerosa y selecta concurrencia”, en el Teatro Bellas Artes, el proyecto de fusión salió adelante.
La situación económica de ambos clubes también animó a aunar esfuerzos, ya que el Racing y el Sporting tenían deudas considerables. Según el rotativo, “la crítica situación por la que atraviesan los dos clubes hace cerca de imposible la existencia de los mismos si no se recurre a la fusión”.
El club resultante se denominó, como no podía ser de otra forma Unión Club de Irún, y adoptó también el título de Real por el impulso que Alfonso XIII dio a la unificación.
Don Eugenio Angoso fue elegido presidente. El nuevo conjunto conservó los colores del Racing -negro y blanco-, ya que el Sporting vestía de rojiblanco. Así, “en medio del mayor entusiasmo, se dio por finalizada la reunión”. La inscripción de socios comenzó de inmediato, y pronto se apuntaron “muchos de los que antes se mostraban indiferentes o que no eran partidarios decididos de la unión. El éxito es seguro”.
El 29 de junio de 1915, el Real Unión jugó su primer partido, ante la Real Sociedad, con victoria por 6-1 para los irundarras.
La mejor época de los unionistas no tardó en llegar. En 1918, el conjunto txuri-beltz ganó el Campeonato del Norte y levantó la Copa del Rey tras batir al Madrid. Además de ganar numerosos campeonatos de Gipuzkoa, volvió a conquistar la Copa en 1924 y 1927. En 1928, el Real Unión participó en el primer campeonato de liga, y permaneció tres temporadas más en la máxima categoría. Desde entonces, el conjunto unionista no ha podido volver a la elite estatal, pero ha seguido siendo la referencia del fútbol irundarra.