El Gobierno vasco va a activar, en el próximo quinquenio, el programa Faros de Innovación, con una dotación cercana a los 500 millones de euros, con el objetivo de impulsar proyectos innovadores que involucren al mundo de la investigación, la empresa y la sociedad, y que se centren en la triple transición que afronta Euskadi en los próximos años: digital-tecnológica, energético-ambiental y sociodemográfica-sanitaria.

En un acto celebrado hoy en Getxo, los consejeros de Ciencia y Universidades, Juan Ignacio Pérez Iglesias, y de Industria, Mikel Jauregi, explicaron las líneas maestras del programa, que estará incluido a través de diversas partidas presupuestarias en varios departamentos del Ejecutivo, siendo el propio de Industria, Transición Energética y Sostenibilidad, el que absorba alrededor de la mitad de los 456 millones de euros de inversión incluidos.

"No queremos que sean proyectos al uso, sino que tengan una relevancia singular y con impacto", indicó el titular del Departamento de Ciencia y Universidades, que subrayó como requisitos para recibir las ayudas directas en las que se basará la financiación que los proyectan sean "grandes" en lo que concierne a los recursos humanos y económicos que deben implicar, y que sean de carácter multidisciplinar, con involucración de agentes académicos, empresariales y sociales.

En cualquier caso, serán las iniciativas vinculadas a la industria las que van a concentrar la atención prioritaria. Jauregi señaló que los objetivos de los Faros "están consensuados" con el sector. Esta estrategia de impulso a la innovación "es lo que nos está demandando la industria", añadió el consejero, que definió como "tempestuoso" el contexto económico internacional. "Vamos a necesitar nuevos sectores económicos, y para eso se necesita conocimiento avanzado. Estos Faros pueden darnos ese conocimiento y pistas sobre hacia donde puede girar la economía del futuro". "Quien no se arriesga, no gana", añadió Pérez Iglesias.

"Entendemos innovación como la creación de conocimiento de vanguardia con el propósito explícito de generar impacto económico o social a corto y medio plazo. Los Faros de innovación son el instrumento para ello. Muy rara vez se hacen hallazgos disruptivos sin ciencia básica excelente. Y esos hallazgos no tienen impacto en la sociedad sin una actitud proactiva que lo propicie", se lee en el dossier explicativo de esta iniciativa.

Los proyectos tendrán su foco en la triple transformación a la que Euskadi y el resto de sociedades occidentales deben hacer frente en los próximos años. En el plano tecnológico-digital las facetas prioritarias serán las de ciberseguridad, cuántica e Inteligencia Artificial. Sobre esta última, Pérez Iglesias señaló que Euskadi dispone de "potencial científico-técnico y un amplio campo de acción en el que es necesario invertir".

Por otra parte, en la transición energético-ambiental, los apartados más relevantes serán los relativos a proyectos a descarbonización, 'one health' -el concepto que une salud humana, animal y medioambiental- y la alimentación "saludable y sostenible". Por último, en el plano de la transición sociodemográfica y sanitaria, se estudiarán iniciativas vinculadas al desarrollo de la sanidad personalizada, los condiciones sociales de la salud y el reto sociosanitario que se presenta, specialmente en lo que concierne a los cuidados en una sociedad que está acentuando su envejecimiento.