Gipuzkoa se encuentra en un momento de transformación en sus infraestructuras viarias, impulsada por un firme compromiso con la movilidad sostenible y el uso de tecnologías avanzadas. El departamento de infraestructuras de Diputación Foral de Gipuzkoa está invirtiendo en la modernización de sus carreteras, integrando soluciones innovadoras que mejoran la seguridad y aseguran el mantenimiento y modernización de las mismas.

A medida que se implementan sistemas inteligentes de gestión del tráfico y se fomenta el uso de vehículos eléctricos, el territorio se posiciona a la vanguardia de la movilidad del futuro. Este esfuerzo, además de reducir la huella de carbono, pretende ofrecer a los usuarios una red de transporte más ágil y conectada, respondiendo a las necesidades de una sociedad cada vez más consciente de la importancia de la sostenibilidad y la tecnología en la vida cotidiana.

Sin embargo, no son pocos los desafíos a los que se enfrenta Gipuzkoa en lo que respecta a garantizar una red de infraestructuras viarias, eficaz, eficiente y bien conectada. Por un lado, la necesidad de conectar 88 municipios repartidos a lo largo y ancho del territorio dio lugar a la culminación de la red de carreteras de alta capacidad, la denominada Rotonda de Gipuzkoa, gracias la cual todos los municipios disponen de una vía de alta capacidad a menos de 15 kilómetros o 15 minutos de distancia.

Conseguido el reto de conectar el territorio, el departamento foral centras sus esfuerzos en que aquellos que transiten por las vías guipuzcoanas lo hagan en las mejores condiciones. Una ardua tarea, dada la compleja y particular orografía, que hace que solo en el territorio guipuzcoano se sitúen el 20% de los túneles del estado, lo que supone contar con 84 túneles. Por otra parte, resulta necesario mantener aquellas vías que juegan un papel esencial en el día a día, muchas de las cuales es necesario modernizar y adaptar a las nuevas necesidades.

Gipuzkoa Living Lab

Además de destinar recursos a rehabilitar las vías ya existentes, el departamento de infraestructuras de Diputación Foral de Gipuzkoa tiene la mirada puesta en la movilidad del futuro, que será sostenible, energéticamente eficiente, digital y conectada, lo que permitirá predecir accidentes o evitar atascos, es decir, posibilitará conducir de manera más segura.

Para ello, mediante el proyecto internacional Gipuzkoa Linving Lab las carreteras guipuzcoanas constituyen un banco de pruebas de manera que se puedan testear sobre el terreno las tecnologías y sistemas que van a necesitar las carreteras inteligentes, conectadas y sostenibles del futuro.

Asimismo, Gipuzkoa forma parte de la red europea POLIS, en la que autoridades locales y regionales fomentan políticas de movilidad sostenible y transporte. Las entidades asociadas buscan alianzas estratégicas y comparten sus experiencias en materia de movilidad y transporte inteligente entre instituciones, las autoridades europeas y el sector del transporte y la nueva movilidad. Gipuzkoa, en concreto, ha trasladado dos asuntos de máxima prioridad en el desarrollado de las carreteras inteligentes en Gipuzkoa: la gestión de datos y la interoperabilidad transfronteriza, por un lado, y la necesidad de desarrollar infraestructuras para la carga de vehículos en las carreteras de alta capacidad del territorio, por otro.

Gipuzkoa forma parte del TEN-T (Red Trans-Europea de Transporte) en su eje atlántico, dentro del nodo Burdeos-Donostia, lo que convierte al territorio en un punto de especial interés como región de testeo de interoperabilidad y el desarrollo de nuevas tecnologías aplicadas al transporte. El departamento de Infraestructuras Viarias está avanzando en la digitalización de la AP-8 y la AP1, lo que le permite tener infraestructuras tecnológicamente equipadas, pero para ello, es clave en estos momentos que el paso de un estado a otro no suponga una frontera tecnológica en cuanto a estándares de comunicación, tanto en términos de gestión viaria como de información para las y los usuarios.