Las Juntas Generales de Gipuzkoa han aprobado hoy por unanimidad crear una ponencia para abordar una reforma fiscal “justa y progresiva”. A iniciativa de EH Bildu y con el voto a favor de todos los grupos junteros, esta iniciativa se pondrá en marcha a partir de enero del próximo año para finalizar su labor de análisis en junio, después de haber escuchado a voces expertas tanto vascas como internacionales y a agentes sociales, sindicales y empresariales.

La ponencia estará constituida por dos representantes por grupo juntero, de los que por lo menos uno pertenecerá a la Comisión de Hacienda y Finanzas, quienes analizarán las experiencias de éxito que se registran “en los países más avanzados a nivel mundial”, según reza en el texto aprobado. Para ello, convocarán a expertos internacionales que expondrán las prácticas con mejor repercusión desde el punto de vista de la progresividad y la redistribución de la riqueza.

La ponencia analizará durante seis meses prácticas de éxito del ámbito internacional

Estas intervenciones se completarán con los puntos de vista de todos los sectores de la sociedad guipuzcoana, desde los sindicatos y empresas hasta representantes del ámbito social, a fin de recabar las necesidades y propuestas del mayor espectro posible de la población. La última reforma fiscal abordada por Gipuzkoa tuvo lugar en 2015, con una modificación posterior en 2018, por lo que los grupos junteros consideran que ya ha transcurrido el tiempo suficiente para comprobar sus consecuencias y plantear un nuevo documento que tenga en cuenta los cambios que se ha producido en estos cinco años.

IMPUESTO A LAS GRANDES FORTUNAS

La aprobación de crear una ponencia sobre la reforma fiscal se ha producido el mismo día en el que el diputado de Hacienda y Finanzas, Jokin Perona, ha comparecido en Juntas Generales para explicar el Impuesto Temporal de Solidaridad a las Grandes Fortunas que deberá ser aprobado antes del 31 de diciembre del presente año para que tenga efectividad tanto en 2023 como en 2024. Este gravamen, que se aplicará a patrimonios de más de 3,2 millones de euros, tendrá un carácter complementario al Impuesto sobre el Patrimonio de actual vigencia, por lo que su incidencia será escasa. Según ha informado Jokin Perona, afectará a alrededor de una decena de guipuzcoanos y se estima una recaudación de unos 300.000 euros anuales.