Un escalofrío debió de recorrer a los responsables del equipo económico de la Casa Blanca cuando conocieron la quiebra, la semana pasada, del Silicon Valley Bank, un banco ligado al sector tecnológico de California. Solo así se entiende que ayer tuviera que comparecer el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, para calmar a todo el país y garantizar que no se repetirá una crisis como la de 2008, que asoló al sistema bancario de EEUU y se contagió a toda Europa. Un mensaje idéntico al que se transmitió desde el Gobierno central y la Comisión Europea. No obstante, los efectos de la inquietud no tardaron en llegar a las bolsas, con caídas generales en todos los índices y particularmente fuertes en el caso de los bancos.
El Ibex perdió ayer un 3,51%, su mayor caída desde junio de 2022. El temor de los inversores a nuevas turbulencias llevó a pérdidas a todo el sector financiero: Los mayores descensos al final de la sesión los sufrían los seis bancos cotizados, encabezados por el Sabadell, que se dejaba un 11,81%; seguido por Bankinter, que cedía un 8,54%; BBVA, un 8,24%; Unicaja Banco, un 7,78%; Santander, un 7,35 %; y CaixaBank, un 6,24%. El selectivo español perdió además la cota de los 9.000 puntos, lograda en enero, cerrando así una jornada nerviosa y con dudas.
Todo arrancó el pasado miércoles, cuando el Silicon Valley Bank, un banco joven -fue fundado en 1983- surgido al calor de la primera revolución tecnológica con el nacimiento del ordenador personal, anunció una ampliación de capital para tratar de hacer frente a sus problemas, que le habían llevado a deshacerse de inversiones por valor de 21.000 millones de dólares. La retirada de dinero por parte de numerosas tecnológicas que tenían ahí sus fondos ha venido acompañada de la quiebra de otras dos entidades -Silvergate Bank y Signature Bank- vinculadas a las startups y las criptomonedas. Los reguladores cerraron Silicon Valley Bank el viernes por falta de liquidez y el Gobierno de EEUU salió el domingo al paso asegurando que los depósitos hasta 250.000 dólares están garantizados.
DEPÓSITOS GARANTIZADOS
Pero el problema está en que la mayoría de usuarios del banco tienen contratados fondos superiores a esa cantidad. Ante esta situación, y viendo que empezaban a reproducirse ciertas similitudes con el caso de Lehman Brothers y el inicio de la anterior crisis, Biden insistió ayer en que el sistema bancario del país “es seguro”. Asimismo, subrayó que los gestores de esos bancos “serán despedidos” y recalcó que los inversores “no estarán protegidos”. “Se arriesgaron a sabiendas y cuando el riesgo falla los inversores pierden su dinero. Así es como funciona el capitalismo”. El dinero para asumir las pérdidas de esas entidades procederá de las tasas que los bancos ingresan al Fondo de Garantía. En Europa, además de las caídas en el Ibex, los descensos se repitieron en los mercados de Francia y Alemania.
Ayer, el comisario europeo de Economía, Paolo Gentiloni, también quiso emitir un mensaje de calma, descartando que la crisis en las entidades estadounidenses tenga un “riesgo real de contagio” sobre la banca del Viejo Continente, aunque añadió que la Comisión está “vigilando” en contacto “estrecho” con el BCE. l
Sin exposición
Estado. La vicepresidenta primera del Gobierno responsable de Asuntos Económicos, Nadia Calviño, destacó ayer lunes que el sistema bancario español cuenta con una situación “saneada” y un marco “reforzado” frente a la volatilidad en los mercados tras la intervención del californiano Silicon Valley Bank (SVB), al que dijo que no le consta que estén expuestos los bancos españoles. “Esta situación de volatilidad en los mercados financieros se encuentra con un sistema bancario español que tiene un marco reforzado”, señaló.