La complicada situación económica vivida durante el año pasado no ha impedido que CAF facture 3.000 millones en este ejercicio con un fuerte salto de los 2.191 millones en ventas registrados en los tres primeros trimestres del año a los 900 millones más logrados en el último cuatrimestre. Su consejero delegado, Javier Martínez Ojinaga, adelantó ayer este dato a la espera de que el próximo 24 febrero se hagan oficiales los resultados de la compañía de Beasain correspondientes al pasado ejercicio.

Ojinaga ha ofrecido hoy una charla en Donostia organizada por Deusto Business Alumni en colaboración con Deloitte a la que han asistido alrededor de dos centenares de personas del ámbito universitario y financiero, fundamentalmente, junto con altos responsables de CAF y la consejera vasca de Desarrollo Económico, Arantxa Tapia.

“Debemos hablar más explícitamente del ADN de CAF para hacerlo un proyecto atractivo”

Javier Martínez Ojinaga - Consejero delegado de CAF

Durante su intervención, Ojinaga ha citado ejemplos de la fortaleza de CAF como su evolución en los últimos siete años y medio en los que, según ha dicho, ha pasado de facturar 1.300 millones a 3.000, mientras que su cartera de pedidos ha saltado de los 6.000 millones de euros a los 10.000 millones. Esta fortaleza constituye una sólida base desde la que afrontar su plan estratégico hasta 2026, cuyos principales rasgos ha desgranado en el coloquio.

PLAN ESTRATÉGICO

Uno de los aspectos que recoge este plan es la inversión de 550 millones de euros en operaciones corporativas que el consejero delegado de CAF no ha detallado, aunque ha adelantado que se enfocarán a la movilidad sostenible y a la proximidad a los mercados. Respecto a este último aspecto, ha indicado que cada vez son más los condicionantes locales a los que se enfrenta el grupo guipuzcoano en sus negocios exteriores que, además, en muchos casos son “sutiles” y no se reflejan en los pliegos de condiciones de las adjudicaciones.

De modo que la que ha calificado como eficiencia operacional se encuentra como uno de los ejes de su estrategia. “Buscamos un diseño en producto y suministros que dé proximidad a los mercados y eficiencia en los costes”, ha explicado, con el objetivo de salvar “las barreras en el comercio internacional que provocan las exigencias locales”. CAF tiene una marcada proyección internacional, dado que un porcentaje superior al 80% de su producción corresponde a exportaciones. También dispone de plantas productivas en el exterior, como en Francia, México, Reino Unido, Brasil y Estados Unidos.

La movilidad inteligente es otra de las áreas en las que CAF centrará sus esfuerzos. En este sentido, Javier Martínez Ojinaga ha afirmado que las áreas prioritarias serán la descarbonización, la automatización y el vehículo autónomo, y la digitalización con el diseño de soluciones innovadoras al que se destina, según ha asegurado, una inversión “continua” del 1,5% de las ventas para potenciar la I+D.

PROYECTOS INTEGRALES

Estos ejes estratégicos no están reñidos con uno de los retos que desde hace años se ha marcado el grupo con sede en Beasain como es situarse entre las primeras empresas del sector proveedoras de proyectos integrales de movilidad.

Todos ellos tienen en común la presencia del tren, “que es en el que se ancla nuestro negocio”, pero contempla tanto la fabricación como la señalización y el mantenimiento de las unidades. “Es un negocio redondo”, ha admitido Ojinaga, quien ha explicado que en determinadas zonas geográficas es la opción preferida porque elimina el coste que genera la coordinación del proyecto.

“En los mercados de valores tenemos un gap del 40% sobre el precio que nos asignan los analistas”

Javier Martínez Ojinaga - Consejero delegado de CAF

Preguntado por el impacto que ha tenido en la actividad cuestiones como las disrupciones en las cadenas de suministro o la elevada inflación, el consejero delegado de CAF ha reconocido que han influido negativamente en los proyectos y resultados, no así en el volumen de inversión que se registra en todo el mundo que, según ha dicoo, se mantiene.

En cualquier caso, la escalada de precios ha tenido un efecto relativo en la cuenta de resultados del fabricante guipuzcoano porque dos tercios de su cartera de pedidos se encuentra blindada frente a la inflación, según ha asegurado Martínez Ojinaga. Por este motivo, ha situado a finales del presente ejercicio la normalización de la rentabilidad en la unidad de negocio de autobuses, mientras que el ferroviario deberá esperar a 2024.