Euskadi aspira a albergar la sede de la futura Agencia Espacial Española. La Consejera de Desarrollo Económico, Sostenibilidad y Medio Ambiente, Arantxa Tapia, ha presentado hoy en Consejo de Gobierno, la idoneidad de la candidatura de Euskadi para acoger a este nuevo organismo. La candidatura ha sido respaldada por el Gobierno vasco y este apoyo será incluido en la presentación oficial de dicha candidatura, cuyo plazo finaliza el día 7 de noviembre.

La Agencia Espacial trabajará de forma coordinada con la Agencia Espacial Europea (ESA) y se encargará de coordinar distintos organismos nacionales y unificar la colaboración internacional. Está previsto que su actividad comience en el año 2023 y que tenga un presupuesto inicial cercano a los 500 millones de euros en programas espaciales. 

La futura Agencia Espacial Española tendrá como principales objetivos, entre otros, el desarrollo tecnológico y la innovación en el ámbito del espacial, el fomento, ejecución y desarrollo de planes de investigación, operaciones en el ámbito ultraterrestre, la potenciación de la industria espacial o la coordinación con la Agencia Espacial Europea.

El Gobierno vasco ha hecho una apuesta firme por el sector aeroespacial, muestra de ello es la reciente adquisición de un 6% del capital de ITP Aero, a través del Fondo Finkatuz, o el convenio con Airbus para trabajar conjuntamente en áreas como la sostenibilidad y la digitalización, firmado este pasado mes de julio. 

Euskadi cuenta, además, con importantes capacidades e infraestructuras científico-tecnológicas de primer nivel a través de la Red Vasca de Ciencia, Tecnología e Innovación (RVCTI), especialmente en los centros que integran la Basque Research Technology Alliance (BRTA).

Más de 70 satélites y vehículos espaciales llevan tecnología vasca y este número se incrementa cada año, por lo que el sector espacial vasco tiene una gran importancia. La traslación en cifras sitúa el volumen de negocio de la incipiente o embrionaria industria espacial vasca, la cifra en sí no muy elevada, pero si se compara con los 18,4 millones de hace diez años, supone que el sector espacial vasco ha triplicado su valor y ha duplicado el número de empresas que dedican total o parte de su actividad al sector espacial.  

El sector aeroespacial vasco está representado por HEGAN, la Asociación Cluster de Aeronáutica y Espacio de Euskadi. Esta Asociación está integrada por 68 miembros, posicionados prácticamente en toda la cadena de valor aeroespacial. Entre los Socios se encuentran 4 Tier1, 48 compañías industriales, 6 centros tecnológicos, 5 universidades y 5 aliados-cluster. Actualmente, los miembros de HEGAN cuentan con un total de 169 instalaciones alrededor del mundo, con 83 centros en Euskadi, 56 en el resto de España y 30 ubicaciones en el exterior (Alemania, Brasil, China, Estados Unidos, India, Malta, México, Polonia, Portugal, Reino Unido y Rumanía). Los Asociados generaron en 2021 una facturación agregada de 1.867 millones de euros en la totalidad de sus plantas alrededor del mundo, frente a los 1.874 del 2020. El sector emplea a más de 14.000 personas en todas sus plantas alrededor del mundo.

En cuanto a la inversión en I+D+i hay que decir que alcanzó los 117 millones de euros en 2021 (de los cuáles, más del 75% corresponden a autofinanciación) y a las exportaciones que se situaron en 1.371 millones de euros, lo que representa el 73,4% de las ventas totales. 

Además de HEGAN, INEUSTAR, la Asociación Española de la Industria de la Ciencia que tiene su sede en Euskadi, también tiene actividad relacionada con espacio. Las Ciencias del Espacio estudian y tratan de resolver los muy distintos problemas que la ausencia de atmósfera o las atmosferas exóticas representan para la vida tal como la conocemos, y los equipos que se desarrollan. Por ello Ineustar, que aborda el mercado de los grandes telescopios, radioantenas, instrumentación y equipos para satélites, y aplicaciones similares, también representa a parte de las empresas vascas con capacidades en este segmento.