- El País Vasco espera que la gran apuesta energético-industrial de futuro, la creación del denominado Corredor Vasco del Hidrógeno- Basque Hydrogen Corridor (BH2C), movilice unas inversiones por importe de unos 1.300 millones de euros en el periodo 2021-2026, según señaló el coordinador de la iniciativa auspiciada por Petronor-Repsol, Jose Ignacio Zudaire, con motivo de la presentación oficial de la propuesta energética en Bilbao.

El proyecto, “una colaboración entre todos”, según señaló el presidente de Petronor, Emiliano López Atxurra, oficializó ayer su puesta en marcha con la firma de las 78 organizaciones, -desde instituciones públicas a empresas pasando por centros tecnológicos y de formación-, que se han sumado a la misma. Entre ellas se encuentran 17 representantes guipuzcoanas.

El mundo está en un fase de incrementar su lucha contra el cambio climático reduciendo las emisiones de gases de efecto invernadero. Y en este proceso, el hidrógeno es un vector clave y “un elemento imprescindible para la transición energética y en la lucha contra el cambio climático”, según recordó la consejera de Desarrollo Económico del Gobierno Vasco, Arantxa Tapia.

Para la consejera, la Unión Europea ha apostado por el hidrógeno como combustible de futuro y, en el marco de esta estrategia, “Europa puede convertirse en líder de esta transformación y Euskadi tiene las fortalezas suficientes para desarrollar este proceso” pues cuenta con empresa tractoras, una industria de bienes de equipo eléctricos, infraestructuras portuarias, redes gasistas y capacidad tecnológica de la mano de los centros tecnológicos y de formación.

La iniciativa puesta en marcha para crear el Corredor Vasco del Hidrógeno tiene unos objetivos ambiciosos, destacó el coordinador del proyecto, Jose Ignacio Zudaire, al contemplar la realización de inversiones por importe de unos 1.300 millones de euros entre 2021-2026, periodo en el que está previsto que se generen 1.340 empleos directos y unos 6.400 inducidos.

Estas inversiones, entre las que destacan 650 millones de euros para producir hidrógeno verde, unos 250 millones de euros para el desarrollo industrial y tecnológico en toda la cadena de valor y 50 millones más en la investigación de aplicaciones del hidrógeno en sectores como el de la movilidad, sector residencial e industria.

Dentro de la iniciativa hay proyectos como la puesta en marcha de una planta de producción de hidrógeno verde junto a la refinería de Petronor o una gigafactoría de producción de electrolizadores.

La apuesta por el hidrógeno como combustible de futuro parece incuestionable a la vista del éxito de la atracción que el corredor BH2C está teniendo sobre el tejido industrial. De salida, se han sumado al proyecto un total de 58 empresas, tanto vascas como españolas.

Entre otras están presentes compañías guipuzcoanas como Ampo, Arizaga Bastarrica, CAF-Solaris, Erreka, Fidegas, Irizar, Jema Energy, Orkli y Sarralle, junto con otras como Aernnova, ABC, Murueta, Ibaizabal, GHI, Idom, Ingeteam, MFS, Nortegas, Sidenor, Talgo, Tubacex o Tubos Reunidos. Además, otras 50 compañías están pensando su participación en esta iniciativa.

Para que los objetivos previstos se hagan realidad ya se han presentado 34 proyectos concretos relacionados con el hidrógeno que evitarán la emisión de 1,5 millones de toneladas de CO2 por ejercicio, gracias a una producción anual de hidrógeno del orden de las 20.000 toneladas, según los planes existentes.

Petronor-Repsol es el motor del corredor vasco del hidrógeno y el presidente de la compañía energética vasca, Emiliano López Atxurra, señaló en la presentación del proyecto que el BH2C es “estratégico para Petronor pero podría ser también una oportunidad de país, siempre que fuéramos capaces de articular una cadena de valor tecno-industrial”.

López Atxurra dejó claro que la iniciativa “no es un producto de la economía financiera, ni un flash de marketing”. Para el máximo responsable de la refinería vasca, este proyecto es “una apuesta clara por la industria”.

Buena parte de estos proyectos optan a recibir financiación de los fondos europeos de recuperación Next Generation, aunque la consejera Arantxa Tapia resaltó que sea como fuere, con subvenciones europeas o no, los proyectos «se van a llevar acabo».

La producción de hidrógeno, según los técnicos, está condicionada a unos precios de electricidad, -generada de forma renovable-, adecuados pues el 70% de los costes están vinculados al consumo eléctrico, el 20% a las inversiones necesarias en equipos y el 5% a gastos operativos.

Es por ello que Emiliano López Atxurra especificó que “consolidar la nueva economía del hidrógeno” precisa de un marco regulatorio estable que no entorpezca la consolidación de este nueva industria de alta tecnología, como está ocurriendo en los países más avanzados.

Del mismo modo, reiteró la necesidad de configurar ese “marco regulatorio adecuado”, ya que de lo contrario “por mucho que se esfuerce la iniciativa privada, la estrategia de la economía del hidrógeno será débil y romperá el principio esencial de la transición energética, que no es otro que sostenibilidad, cohesión socio-económica y seguridad de suministro”.

En este contexto tendrá una influencia determinante el marco eléctrico y los peajes del sector energético en el Estado, ya que el 70% del coste de producción de este tipo de hidrógeno verde es correspondiente al de la energía eléctrica para realizar el proceso de electrólisis que permite generar hidrógeno a partir de agua.

Para López Atxurra, Euskadi cuenta con una buena ubicación geográfica para desarrollar un nuevo sector relacionado con el hidrógeno, puesto que puede convertirse en un nodo energético para los corredores del Atlántico hacia el exterior y del Ebro para la península ibérica.

Al acto celebrado ayer asistió de manera telemática el secretario de Industria del Gobierno español, Raul Blanco. El responsable gubernamental resaltó que “la energía es un vector clave en la transformación que estamos viviendo” y destacó que “en España tenemos toda la cadena de valor y esto no ocurre siempre, para apostar por el hidrógeno”.

Para el representante del Ejecutivo central, “España será un referente mundial en este ámbito y el reto es crear a partir de las renovables y la apuesta por el hidrógeno, toda una industria, con electrolizadores y demás”.

Según aseguró el secretario de Industria del Gobierno estatal, el proyecto presentado ayer “va a estar en la primera línea los próximos años”.

En cuanto al calendario del proyecto, el Corredor Vasco del Hidrógeno se desarrollará en dos fases. La primera de ellas actualmente en marcha finalizará en 2026, con esos 1.300 millones de euros de inversiones previstas, y contempla producir 20.000 toneladas de hidrógeno. Destaca la inversión de 650 millones de euros en producción de hidrógeno con una capacidad instalada de 112 Mw, para lo que se construirán tres instalaciones.

La primera de ellas, de Petronor, estará en funcionamiento el próximo año y tendrá dos Mw y servirá para alimentar el futuro Parque Tecnológico de Abanto. La segunda instalación, de Petronor, EVE y Enagas, entrará en funcionamiento el año 2024 y estará ubicada en el puerto de Bilbao. La misma tendrá diez Mw, y su producción estará destinada a la planta de combustibles sintéticos.

La tercera, cuyo calendario se centra en 2025, tendrá 100 Mw y servirá para descarbonizar el proceso productivo de la refinería de Petronor así como abastecer las necesidades del propio corredor. Además, se instalará una planta de fabricación de biogás que a partir de residuos sólidos urbanos producirá hidrógeno.

Asimismo, se contemplan inversiones de 250 millones de euros para industrializar el desarrollo tecnológico a lo largo de la cadena de valor. Dos empresas vascas, Sener e Ingeteam contemplan poner en marcha plantas de electrolizadores.

Inversiones. Los 34 proyectos ligados a la iniciativa contemplan inversiones de 1.300 millones de euros hasta 2026.

Empleo. Se prevé generar 1.340 millones empleos directos y unos 6.700 indirectos.

Producción. Alcanzará las 20.000 toneladas anuales de hidrógeno y eliminará 1,5 millones de toneladas de CO2 al año.

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organizaciones guipuzcoanas forman parte de esta iniciativa impulsada por Petronor-Repsol.