- Los ayuntamientos guipuzcoanos recibirán este año de las arcas forales 78 millones menos que el ejercicio pasado por el descenso de la recaudación que ha motivado la crisis generada por la pandemia de coronavirus. La Diputación les entregará en conjunto 451 millones de euros, lo que representa una caída del 14,78% con respecto a lo percibido un año antes.

Estas cifras fueron dadas a conocer ayer por el diputado general de Gipuzkoa, Markel Olano, durante su comparecencia en las Juntas Generales para explicar los asuntos tratados el pasado jueves en la reunión del Consejo Vasco de Finanzas, donde se constató un retroceso en la recaudación vasca que, según aseguró, no afectará a los proyectos estratégicos impulsados por la entidad foral.

La caída de ingresos en las arcas forales de Gipuzkoa se cifra en 631 millones en comparación con la cifra obtenida un año antes, lo que representa un descenso del 12,6%. El territorio recaudará 4.393 millones de euros, menos de lo que se había previsto inicialmente, en concreto 743 millones por debajo de lo estimado.

Este bajón, que podría haber sido mayor de no haberse conseguido muy buenos resultados en la campaña de 2019 que mitigan la caída, según Markel Olano, afectará directamente al montante que los ayuntamientos recibirán de las arcas forales. No será hasta el próximo lunes, durante la reunión del Consejo Territorial de Finanzas, cuando cada uno de los consistorios conocerá en qué proporción se reduce la aportación que le entrega la entidad foral.

No obstante, el diputado general advirtió de que “los consistorios conforman un nivel institucional muy importante en la lucha contra la crisis que ha provocado la enfermedad COVID-19”, por lo que aseguró que desde la entidad foral se les ofrecerá opciones de endeudamiento si lo necesitan.

La situación cambiará el siguiente año, dado que las previsiones apuntan a una recuperación en 2021. El diputado general de Gipuzkoa trasladó a este territorio los datos que se dieron a conocer ayer a nivel de Euskadi para apuntar que la recaudación foral crecerá un 5,8% con respecto a 2020, 255 millones de euros más que la estimación de cierre de este año.

El retorno a los números positivos beneficiará a los ayuntamientos guipuzcoanos, que también percibirán de la Hacienda foral 47 millones de euros más, con un incremento superior al de la recaudación general del 10,35%.

Las previsiones de cierre del año no son, pues, tan negativas como lo planteado inicialmente, donde se temía una caída del 20% a la que finalmente no se ha llegado y que Markel Olano atribuyó “no a un mejor escenario económico, sino a que las campañas que gravan el ejercicio anterior han sido muy buenas”. Así se constató en el Consejo Vasco de Finanzas, donde también se determinó el pasado 30 de septiembre la capacidad de endeudamiento de las instituciones vascas.

“Con estos dos elementos, se ha aclarado mucho nuestro escenario financiero”, consideró Olano para aseverar que Gipuzkoa reúne las condiciones necesarias para mantener las principales apuestas forales y sus proyectos estratégicos de futuro.

De este modo, Markel Olano avanzó que los planes que considera claves para la presente legislatura no experimentarán ninguna variación, y destacó entre ellos Mubil, Naturklima y Adinberri. El primero de ellos contempla la consolidación de un centro especializado en electromovilidad y se encuentra en fase de construcción del primer edificio en Tolosa, que posteriormente será sustituido por el de Eskusaitzeta en Donostia.

La apuesta por la nueva movilidad, que la entidad foral observa como una importante oportunidad de crecimiento económico, se encuentra a la par de la relativa al cambio climático, cuestión en la que la Diputación de Gipuzkoa ha puesto gran énfasis materializado en el proyecto Naturklima.

Junto con estas dos prioridades, Olano fija el envejecimiento activo y los servicios dirigidos a los mayores como otro de los pilares de la gestión foral durante la presente legislatura, y de ahí que anunciará que se seguirá impulsando Adinberri, el centro especializado en esta materia.

Si bien mantener el avance en estos proyectos contemplados en Etorkizuna Eraikiz es un compromiso que expresó ayer el diputado general de Gipuzkoa, también advirtió de que se gestionarán “con sentido común y prudencia” dado, que según explicó, la capacidad de endeudamiento que se la ha atribuido a la entidad foral no significa que “tengamos un cheque en blanco”.

La elección de estos proyectos, además, está fundamentada en su capacidad de traccionar la economía del territorio porque existen agentes competitivos en estos terrenos, ofrecen interesantes oportunidades de negocio y se alinean con las estrategias europeas. Por este motivo, Olano incidió ayer que son “imprescindibles” para alcanzar las dos máximas prioridades que se ha fijado la Diputación frente a la crisis generada por la pandemia de coronavirus como son fortalecer las políticas sociales e impulsar la actividad económica.

12,6

puntos porcentuales es la caída que experimentará la recaudación de Gipuzkoa este año con respecto al ejercicio anterior, lejos del 20% que se estimó en un inicio gracias a los buenos resultados obtenidos en la campaña correspondiente a 2019.

14,7

puntos porcentuales es lo que bajará la cantidad que la Hacienda foral destina a los ayuntamientos de Gipuzkoa, algo superior al descenso general. Los consistorios percibirán este año 451 millones de euros, lo que reduce en 78 millones la cifra de 2019.

“Para superar la crisis es fundamental seguir haciendo apuestas de futuro”

“Los consistorios son importantes en la lucha contra la crisis y tendrán opción de endeudarse”

Diputado general de Gipuzkoa