donostia - El número de autónomos en comercio y reparación de vehículos en Gipuzkoa se ha duplicado en los últimos meses del año en una progresión ascendente que comenzó en septiembre, cuando se registraron 24.604 trabajadores por cuenta propia frente a los 11.343 afiliados en esta actividad en el Régimen Especial de Trabajadores Autónomos RETA del anterior mes de agosto.

Según la información de la Seguridad Social, desde inicios del último cuatrimestre del año el colectivo de autónomos en Gipuzkoa que se dedica al comercio y reparación de vehículos ha experimentado sucesivos crecimientos hasta alcanzar en diciembre los 24.805. En el mismo mes del año anterior, este número era de menos de la mitad, 11.637 autónomos.

La evolución al alza de los trabajadores por cuenta propia de esta actividad en el territorio contrasta con el comportamiento que se ha observado en el conjunto de la CAV, donde la cifra ha descendido en 1.179 trabajadores, y con el movimiento de la propia Gipuzkoa, que ha visto descender este colectivo relacionado con la actividad comercial año tras año desde 2009, con la única excepción de 2014, cuando despuntó tímidamente.

Si bien es cierto que la actividad turística se ha incrementado de manera significativa en el territorio guipuzcoano y que la recuperación económica ha mejorado las condiciones de las personas, que encuentran una mayor seguridad para emprender su propio negocio, existen otros factores que influyen en este despegar del número de trabajadores por cuenta propia en comercio y reparación de vehículos.

Silvia Martínez, secretaria general de UPTA-Euskadi, atribuye este positivo comportamiento al despunte de la afiliación extranjera y al final del subsidio del desempleo, ambos de carácter puntual que se concentran en la época final del año.

Según explica, UPTA-Euskadi ha observado un importante alza de autónomos extranjeros debido a que en los últimos meses del año deben obtener o renovar su NIE (el DNI de las personas procedentes de fuera del Estado). El Ministerio de Inmigración establece una serie de requisitos según el tipo de documento que solicite la persona foránea y en los muchos casos exige que tengan un trabajo.

“Mucha gente necesita renovar los papeles y busca una salida”, señala Martínez, quien añade que suele ser establecerse como autónomo. UPTA-Euskadi conoce de cerca esta realidad puesto que se responsabiliza de revisar los proyectos de negocio que presenta este colectivo para apoyarlos o rechazarlos, aunque la mayor parte de los casos siguen adelante.

obligación Sin embargo, Martínez admite que estos nuevos autónomos extranjeros se integran en este modelo más por necesidad que por espíritu emprendedor, al igual que otras personas a las que se les acaba el subsidio de desempleo, más habitual en la parte final del año, y que se ven obligadas a establecerse por su cuenta para intentar encontrar una vía de ingresos.

Este último colectivo tiene ocasión de acceder a planes formativos y ayudas al emprendimiento que impulsan las distintas instituciones públicas, con las que Silvia Martínez se muestra muy crítica. “No sirven para nada”, afirma tajante.

Según explica, “los planes de emprendimiento del Gobierno Vasco no están teniendo los resultados que buscaban” porque, efectivamente, en un primer momento logran incrementar el número de personas activas, tal y como se refleja en las estadísticas de Gipuzkoa, donde los autónomos de comercio y reparación de vehículos se han disparado, pero se trata de un hecho coyuntural. “Salen de Lanbide con la tarifa plana, pero esta solo dura dos años y, una vez se les acaba, tienen que cerrar” el comercio, lamenta Martínez, que durante su trayectoria ha conocido un alto número de este tipo de casos.

La secretaria general de UPTA-Euskadi advierte de que este importante repunte de trabajadores por cuenta propia en Gipuzkoa no responde a que las condiciones son mejores que en Álava o Bizkaia, sino que se debe a que a finales de año confluyen estos factores que en los otros dos territorios no se dan.