DONOSTIA - La Confederación Empresarial Vasca, Confebask, ha rebajado su previsión de crecimiento de la economía vasca para 2019 en tres décimas, al 2,2%, y ha situado su estimación para 2020 en el 1,9%, con la generación de 11.000 empleos y una tasa de paro prevista del 9%, en el que será el "séptimo año consecutivo" de incrementos tanto del PIB como de la creación de empleo en Euskadi.

Estas previsiones han sido dadas a conocer este viernes en Bilbao por el presidente de Confebask, Eduardo Zubiaurre, y su director general, Eduardo Aretxaga, junto al miembro del Departamento Económico Pablo Martín, en una comparecencia en la que han incidido en la necesidad de "asegurar la estabilidad sociopolítica, institucional y legislativa, para generar confianza", de cara a la inversión y el consumo.

El informe de Coyuntura Económica de 2019 y 2020 estima un crecimiento de la economía vasca en 2020, ligeramente inferior al de 2019, tres décimas menos, pero por encima de los países de su entorno, en el "séptimo año consecutivo en aumento del PIB y creación de empleo".

Se trata, ha señalado Zubiaurre, de un crecimiento "en consonancia con lo previsto para las economías europea y española, y para las que se apunta en la parte final del año una mejoría, siempre y cuando no se agraven o aparezcan nuevas incertidumbres" a las actuales.

Las claves del aumento de la economía vasca para el año que viene vuelven a descansar en la demanda interna, de nuevo el principal motor de este crecimiento, ya que el sector exterior tendrá, como en 2019, "una contribución nula al crecimiento por el escenario internacional complejo a corto y medio plazo", ha añadido.

Por sectores, la industria vasca "seguirá acusando" las dificultades del panorama internacional, aunque crecerá un año más (+1,1%), y lo hará incluso algo por encima de lo logrado este 2019. Una vez más, la construcción será el sector más dinámico, si bien a un menor ritmo que este año.

AFILIACIONES SEGURIDAD SOCIAL

En 2020, la economía vasca volverá a crear empleo y a reducir el paro, con 11.000 nuevos afiliados a la Seguridad Social y una tasa de paro (Eustat) a final de año que descenderá hasta el 9%, la más baja desde 2008. De esta forma, para finales de 2020, la estimación es que Euskadi supere el nivel de empleo que había en 2007, antes de la crisis.

En su comparecencia ante los medios de comunicación, tanto el presidente de Confebask, como su director general, han insistido en "la importancia de seguir mejorando y atender los retos y desafíos del próximo ejercicio, "si queremos prolongar la actual etapa de crecimiento económico y del empleo".

Entre esos retos, Zubiaurre ha pedido "favorecer una estabilidad sociopolítica, institucional, y legislativa que contribuya a generar confianza para la inversión y el consumo, mantener y reforzar la apuesta por la industria, la digitalización y la manufactura avanzada, así como diseñar una política energética que garantice un coste eficiente, previsible y que no perjudique la competitividad de las empresas".

Asimismo ha reclamado una política fiscal en lugar de una política monetaria para estimular el crecimiento económico y la inversión empresarial, y un impulso de políticas y reformas acordes a la actual coyuntura de desaceleración económica".

Tanto Zubiaurre como Aretxaga han insistido en reclamar "marcos sociopolíticos e institucionales estables y generadores de confianza, en los que se puedan llegar a acuerdos con los que dar respuesta a los temas clave donde apoyar el progreso y el bienestar futuro".

Desde el punto de vista de Confebask, "la elevada incertidumbre debería impulsar la adopción de medidas y políticas consensuadas que aseguren la continuidad del crecimiento económico, la actividad y la competitividad empresarial, así como la generación de empleo".

De cara a 2020, los empresarios vascos consideran que la demanda interna "será de nuevo el principal motor del crecimiento económico vasco, dado que el sector exterior tendrá, como en 2019, una contribución nula al crecimiento, ya que se desenvolverán en un escenario complejo, similar al de este año, con factores como la guerra comercial entre Estados Unidos y otras potencias mundiales, un bajo crecimiento europeo, y las consecuencias e incertidumbres en torno al Brexit.

Por sectores, la industria vasca "seguirá acusando las dificultades del sector manufacturero a nivel mundial, y será el sector con menor crecimiento, aunque por encima del crecimiento logrado en 2019".

REVISIÓN A LA BAJA

Por otro lado, la patronal vasca ha revisado su estimación para 2019 de la economía vasca, que había previsto que cerraría el presente ejercicio con un crecimiento del 2,5% y 14.000 nuevos empleos, pero que finalmente ha fijado al cierre de este año en tres décimas menos, un 2,2%, con la creación de 13.200 empleos, apenas 800 menos que su previsión de diciembre de 2018.

Con esta evolución, Confebask estima que la tasa de paro descenderá en Euskadi este 2019 hasta el 9,5%, frente a su previsión anterior de alcanzar el 7,5%, aún y todo, la más baja desde 2008 y ocho décimas inferior a la registrada al finalizar 2018. Pese a todo, el aumento del PIB de Euskadi de este año duplicará al vaticinado para el conjunto de la zona euro.

Esta variación al alza del paro está motivada, han indicado ambos directivos, "no por un menor tirón del empleo, sino por el aumento de la tasa de actividad, al incorporarse un creciente número de personas a la búsqueda activa de empleo".

Las claves de la ligera desaceleración prevista para este 2019 que termina "radican en una demanda interna más débil y una menor actividad de la industria, que, aún así, crecerá en 2019 por quinto año consecutivo".

En relación con el empleo creado durante el actual ejercicio, la afiliación aumentará en unas 20.000 personas respecto a diciembre de 2018, "que se quedarían en 13.200 una vez corregido el efecto al alza consecuencia de la incorporación de los cuidadores no profesionales, una cifra que se ajusta más a la estimación que realizábamos hace un año".

En cualquier caso, ha añadido Zubiaurre, el año finalizará con el mayor número de afiliados en Euskadi desde 2008 y la tasa de paro más baja desde 2009, aunque en un porcentaje mayor que el previsto hace un año.

SALARIOS

El presidente de Confebask ha destacado en su intervención que durante 2019 "han seguido mejorando las condiciones laborales en Euskadi, con un incremento, de una parte, de las contrataciones indefinidas, que, a cierre del ejercicio, sumarán unas 84.000, el segundo mejor año tras un 2018 excepcional". Para este año, se ha superado el récord de afiliados con contrato indefinido, 550.000 personas.

De otro lado, los salarios recogidos en convenio han registrado, por tercer año consecutivo, un incremento superior al IPC y también "hay que destacar que, con los datos que disponemos hasta octubre, 2019 concluye con un nuevo mínimo histórico de trabajadores afectados por algún ERE".

Los máximos responsables de Confebask han incidido en que el sector exterior ha tenido a lo largo de este año una aportación nula al crecimiento económico, al igual que ya ocurriera en 2018, con un estancamiento tanto de exportaciones como de importaciones, ante el acusado frenazo del ritmo de crecimiento del comercio mundial".